Las historias de zombis se reinterpretan para trascender y hablar de algo mucho más universal: el duelo. En un tríptico familiar, se ahonda en ese sentimiento desde un aura tenebrosa y una realización comedida.
Las historias de zombis se reinterpretan para trascender y hablar de algo mucho más universal: el duelo. En un tríptico familiar, se ahonda en ese sentimiento desde un aura tenebrosa y una realización comedida.
Griffin Dunne lidera un reparto que interpreta a personajes en crisis. Aunque su inicio es prometedor y está envuelto en humor, la historia pierde interés en la segunda mitad y acaba resultando larga.
Documental que muestra al pionero del rock-and-roll Little Richard como un fenómeno estelar de la historia de la música y de la comunidad queer, por su orientación sexual y su imagen.
Este cuento moderno, pese al desaliento de los problemas sociales y personales de los personajes, mezcla lo dramático con un humor certero y tierno. Es una obra minimalista y esperanzadora de amor y resiliencia.
Erice estrena su cuarto largometraje treinta años después de El sol del membrillo. A sus ochenta y tres, el cineasta vasco vuelve en plena forma, con su personal estilo autoral en una película sobre la memoria y la identidad.
Una historia emotiva, sensible y delicada. En su tratamiento de las dificultades en las relaciones materno-filiales y cómo los recuerdos son olvidados, subyace un mensaje de perdón y redención.
Las montañas son el lienzo de esta historia de amistad, sobre el que se reconstruyen relaciones. Pese a su innecesaria literalidad, la película deja un bonito listado de cuestiones sobre las que reflexionar.
Pietro Marcello vuelve a una adaptación literaria en su nueva poética y bucólica obra. Narra una historia de amor con una hermosa fotografía que resalta la esperanza como uno de los pilares de la vida.
Álvaro Gago continúa su cortometraje homónimo en un debut de denuncia social que deja lugar también para el humor y la ternura. Con una actriz protagonista magnética, hace un buen retrato de la situación laboral.
Ruben Östlund articula una crítica muy divertida sobre la alta esfera social y el capitalismo extremo. Aun con escenas acertadas, el film resulta grotesco e irregular por momentos, lo que puede desalentar a cierto público.