El club de los milagros

A veces uno solo busca una feel good movie para pasar un rato agradable y, en esos momentos, una propuesta como El club de los milagros encaja perfectamente. A pesar de que es predecible, tiene personajes estereotipados y el relato es ligeramente edulcorado, en ocasiones uno no necesita más que una celebración de la amistad. Y si además puede deleitarse con un reparto estelar, el disfrute está servido.

La película acompaña a cuatro mujeres de tres generaciones en una peregrinación a Lourdes, cada una por un motivo diferente. La relación que hubo entre ellas se va dejando ver poco a poco a lo largo de este viaje de reconciliación y el espectador se sumerge en sus historias gracias a las brillantes interpretaciones de las actrices protagonistas.

Sin sorpresas ni grandes hitos, la trama se desdobla permitiendo así explorar diversas temáticas en el santuario y, a la vez, retratar la incompetencia de los maridos que han quedado en Irlanda y aportan cierto humor –aparte de clichés–. De este modo, se habla sobre la familia, la muerte y la fe, entre otros, mientras sus personajes obtienen sus milagros (aunque quizá no los que buscaban).

Firma: Patricia Amat