Aunque el terrorismo de ETA ya forma parte de la historia, sus consecuencias aún se sufren hoy en día y El comensal es una película más sobre el daño que afligió este grupo desde el punto de vista de familiares de las víctimas. Basada en el libro de Gabriela Ybarra, la cinta establece dos periodos narrativos diferentes: uno en 1977 y otro en 2011.
A pesar de la temática sugerente –a la vez que dura–, el film no consigue despegar debido al gran desequilibrio entre sus dos líneas temporales. Ginés García Millán y Susana Abaitua hacen un buen trabajo, pero los secundarios que los acompañan no están a la altura. Entre diálogos toscos, emociones sobreactuadas y falta de dirección del guion en algunos momentos, el público puede no llegar a sumergirse en la trama.
Aun así, no se hace larga, y ofrece varios planos dignos de bodegón, así como alguna escena entrañable –y una composición magnífica de padre e hija recorriendo el bosque–. Además, muestra cómo los traumas causados por ETA van más allá de una generación y a veces requieren un enfrentamiento al pasado para superarse.
No obstante, puede que los múltiples defectos del largometraje no permitan a algunos espectadores apreciar sus virtudes.
Firma: Patricia Amat
Director: Ángeles González Sinde
Guionistas: Ángeles González Sinde, Gabriela Ybarra
Intérpretes: Adriana Ozores, David Luque, Fernando Oyagüez, Ginés García Millán, Susana Abaitua
Género: Drama
País: España
Fecha estreno: 27/05/2022
Lenguaje: Coloquial
Iciar y Fernando son dos jóvenes que afrontan la misma situación: la pérdida de uno de sus padres. No obstante, viven en épocas distintas. Fernando sufre el secuestro de su padre por parte de ETA en Bilbao en 1977 e Iciar cuida a su madre, con cáncer terminal en Navarra en 2011.
Título original: El comensal
País: España
Duración: 100'
Fecha producción: 2022
Distribuidora: A contracorriente films
Color: Color