
La fortaleza parece prometer más en su arranque pero, a medida que avanza, va perdiendo fuelle a causa de su ritmo desigual, algunas actuaciones exageradas y un guion que no acaba de funcionar.
La fortaleza parece prometer más en su arranque pero, a medida que avanza, va perdiendo fuelle a causa de su ritmo desigual, algunas actuaciones exageradas y un guion que no acaba de funcionar.
Quien mucho abarca… ciento volando. Y es que Jaguar no se concentra. Se pierde entre querer proponer algo nuevo y algo viejo, algo divertido y algo dramático, algo creíble y algo increíble y, así las cosas, ¿la vemos o no la vemos?
Carlos Sedes dirige un drama superficial del que solo puede ensalzarse la fotografía. La trama es simple y tediosa, el reparto no es estridente y lo único que se disfruta es el recorrido a través de los viñedos de Jerez.
Terror de producción española inspirado en hechos reales ocurridos en el madrileño barrio de Malasaña en los años 70. Una propuesta solvente para los amantes del género que no sean demasiado exigentes.