El gran año

Inspirado en libro de Mark Obmascik, David Frankel (El diablo viste de Prada, Una pareja de tres) y Howard Franklin (Conspiración en la red) llevan a cabo una divertida adaptación, en la que se conjuga tanto la parodia como el homenaje a tan peculiar afición.

El guión traza una relación entre salir de la rutina, confiar en la búsqueda de un sueño y acudir a la naturaleza, y superar así algunas etapas críticas de la vida: la jubilación cercana, la mediana edad o la incapacidad para asumir una vida sedentaria en familia. La película no se toma en serio, de manera absoluta y dramática, los tres conflictos, pero tampoco se dedica a trivializarlos como gran parte de las comedias actuales.

La belleza de los parajes y el acierto en el casting –no se trata de grandes actores pero encajan y diversifican muy bien sus roles- constituyen lo mejor de una comedia, que no busca la risa sino la sonrisa. Frankel también confiere protagonismo a la banda sonora, no sólo en lo que a cantos de pájaros se refiere- sino a un elenco de canciones (muchas de ellas clásicos del rock y del country) que tienen a las aves como tema de sus letras.

Jack Black es el conductor del relato en uno más de los múltiples papeles de perdedor que ha interpretado a lo largo de su todavía muy activa carrera.

Firma: Lourdes Domingo