Volvemos un año más con un blog cinéfilo y literario al mismo tiempo para honrar este mes de abril, el Día del Libro y Sant Jordi. Para ello, desde Contraste, hemos decidido echar la vista atrás a este último año cinematográfico y resaltar aquellas obras que, antes de quedar en imágenes, esperaban a ser descubiertas entre las líneas de los libros.
Antes de poner la mirada más allá, centrémonos en aquellas traslaciones del papel a la pantalla que han ocurrido dentro de nuestras fronteras. En ellas hallamos dramas familiares como Wolfgang, una película que además sabe equilibrar el humor para que disfruten tanto padres como hijos, o La casa, la cual nos hace reflexionar sobre las relaciones con nuestros seres queridos y el recuerdo que nos dejan tras su muerte. Justamente este es un tema que comparten otras dos de las grandes películas del año: la almodovariana La habitación de al lado y la luminosa Los destellos. Cada una de ellas invita a aproximarse a este denso asunto desde lugares distintos, pero complementarios.
Aquí encontramos dos claras propuestas de animación para públicos muy distintos. Si sois amantes del anime y, más aún, del joven detective Conan Edogawa, podéis encontrar un divertimento en su última entrega fílmica, Detective Conan: the million dollar pentagram, más cercana al thriller. Pero si queréis descubrir nuevos mundos, no podemos evitar destacar una de las mejores películas del año pasado: la mágica y emotiva Robot salvaje.
Aunque si lo vuestro son las historias de carne y hueso, también tenemos opciones. En Alas blancas seguimos a uno de los personajes de Wonder para descubrir un argumento lleno de luz y valores positivos, óptimos para discutir con los pequeños de la casa. En Paddington: aventura en la selva, la peripecia de esta tercera entrega asegura un divertido rato en familia, para pasárselo bien y reír. Y, si lo vuestro son los musicales, entonces no hay duda de que no os podéis perder Wicked. Del libro a los escenarios y ahora al cine, esta es una obra para soñadores que entretiene y ensalza la amistad.
Como en todo, hay variedad y la ciencia ficción no es menos; puede ser poética, política o marvelita. A elección del espectador. Si sois más de los primeros y queréis obras que os hagan discurrir un poco, entre metáforas y escenarios casi oníricos, os proponemos adentraros en Luka. Por el contrario, si preferís asuntos contemporáneos, pero sin dejar de lado la reflexión: Mickey 17 es una buena alternativa (y más aún si sois fans de la anterior película del director, Parásitos). Y si sois más de evadiros y disfrutar de buenas dosis de acción siempre podéis recurrir a Marvel con Capitán América: un nuevo mundo (lo de ciencia ficción puede estar cogido con pinzas, pero pasarlo bien lo pasaréis).
Podemos comenzar a lo grande, con la reciente Amateur. Si queréis un clásico e intrigante thriller, con un poco de todo –persecuciones, explosiones, rompecabezas…– y para el que merezca la pena acudir a la sala de cine: esta es vuestra opción. No obstante, si queréis algo más fantasmagórico y de misterio, podéis darle una oportunidad a Los indeseados. No redescubre nada, pero satisface a los fans de este género.
Si damos un salto al terror, os ofrecemos dos opciones muy dispares y que llevan a este género por derroteros distintos, alejándose de lo que se entiende por terror al uso. En Descansa en paz se entremezcla con el drama y la fantasía, narrando una historia de zombis como excusa para ahondar en algo más universal: el duelo. En cambio, en The monkey, los fans de Stephen King y de las películas sangrientas, encontraréis una entretenida (pero muy adulta) comedia negra.
Llegamos al final de esta revisión de las mejores adaptaciones o, al menos, aquellas que merecen mención por unas u otras razones, y no podemos olvidarnos de tres grandes películas que parten no solo de libros, sino que están basadas en hechos reales. En primer lugar tenemos una nueva versión del clásico de Alexandre Dumas: El conde de Montecristo, un drama de aventuras que vale la pena ver en pantalla grande. A continuación, podemos sugeriros un film que, conformado por un gran reparto, proviene de una recopilación de fotografías y entrevistas publicadas por Danny Lyon: Bikeriders. La ley del asfalto. Y, por último, pero no por ello menos importante, os invitamos a darle una oportunidad a la ganadora del Oscar a mejor película internacional en la pasada edición. La brasileña Aún estoy aquí es un ejemplo de cine político que busca enmendar cuestiones pendientes y honrar a toda una sociedad. Todo un testimonio que construye su guion a través de las memorias de Marcelo Rubens Paiva, hijo de la protagonista de la historia: Eunice Paiva, interpretada aquí por una inconmensurable Fernanda Torres.