Desde el mañana

Con una trama de ciencia ficción que promete novedades (o por lo menos variedad) en la oferta actual, Desde el mañana se presenta como una historia casi familiar de intriga, misterio, acción policial, drama y romances. Y hay que reconocer que posee de todo un poco, pero la cantidad de ingredientes no hace buena una receta, sino su mesura, su calidad y su acierto. Nada de lo cual descubrimos en este título.

La sensación es que los cuatro primeros capítulos se podrían condensar en uno, si los personajes se sentaran a hablar un ratito entre ellos y compartieran información; los cuatro siguientes en otro, si la protagonista no se separara del dichoso mineral y obtuviera toda la información necesaria para desentrañar el futuro, y los dos últimos… si el espectador ha llegado hasta allí, es que no le importa el guion.

Con un reparto plagado de caras conocidas, los actores hacen lo que pueden con sus personajes de cartón pluma y sus diálogos de anuncio televisivo. Y, si no es por el aderezo musical o las circunstancias personales de quien esté viendo la serie, resulta complicado empatizar con las emociones que pretenden transmitir sus protagonistas. A su vez, la trama desborda los límites de “esto ya lo hemos visto antes” y, además, reúne en un tiempo récord todos los tópicos imaginables. En resumen: no es novedosa y sí predecible.

No se sabe lo que habrá llevado a Daniel Écija (La valla) a construir esta serie, lo que sí ha demostrado muchas veces es que sabe hacerlo mejor, mucho mejor. Veremos si hay una segunda entrega y sí, por fin, la vida emerge de las profundidades terrestres y regala nuevos aires desde el mañana al presente.

Firma: Mar Pons