
Dos rutinas que confluyen en los mismos lugares, pero sin percatarse, dan vida a la nueva cinta de Cédric Klapisch, que, ambientada en París, combina escenas de humor con diversas reflexiones.
Dos rutinas que confluyen en los mismos lugares, pero sin percatarse, dan vida a la nueva cinta de Cédric Klapisch, que, ambientada en París, combina escenas de humor con diversas reflexiones.
Hugo Gélin afrancesa con gusto y acierto el patrón clásico de la comedia romántica. Su toque de fantasía y su escenario físicamente idílico pero sentimentalmente en tensión resultan eficaces.
Un relato mórbido acerca de la frustración en el amor y de las amenazas de las redes sociales, que acaba en un tejido de tretas y falsedades, donde únicamente destaca el gran trabajo de Juliette Binoche, que muestra muy eficazmente varias facetas en un mismo personaje.
Tras la muerte de su padre, tres hermanos se unen para cuidar de las viñas de la familia. El film de Cédric Klapsich supone un conjunto de atractivas imágenes en una película para ahondar en la fraternal cosecha de la vida.