Rocket League

La crítica del principiante

Después de tantos años jugando a videojuegos, es difícil que algún título consiga sorprendernos. Sin embargo, de golpe apareció Rocket League, un arcade deportivo descargable que, tanto éxito cosechó, que se ha relanzado en formato físico. ¿Queréis conocerlo mejor?

Pura diversión arcade

La propuesta de Rocket League es muy sencilla y busca divertir desde el primer momento con partidos frenéticos a toda marcha.

Nuestro objetivo es el de conducir un coche por circuitos cerrados y ovalados con el objetivo de golpear una pelota gigante e introducirla en la portería contraria. Como os podéis imaginar, jugamos partidos de fútbol pero con coches en lugar de futbolistas.

Las partidas son completamente frenéticas, ya que estos vehículos tienen habilidades especiales como saltar o un tubo propulsor. Sin ninguna regla adicional que detenga el juego (no esperéis encontraros con penalties o faltas), cada partido es una batalla campal entre diversos jugadores.

Mejor en compañía

Pese a que se puede jugar en solitario, el título gana mucho si lo hacemos contra otro compañero offline u online. La cantidad de opciones en esta vertiente son considerables, con partidas de hasta 4 vs 4. Especialmente divertido es en Switch, ya que los partidos son cortos e intensos, ideal para una portátil.

También se pueden jugar partidos de exhibición en solitario y dispone de una modalidad Carrera bastante entretenida, aunque algo limitada. Se ha de remarcar, como punto a mejorar, el nivel de inteligencia artificial de la consola, bastante bajo por lo general.

Mucho por descubrir

A medida que participamos en partidos, adquirimos puntos de experiencia. Estos sirven para desbloquear nuevos vehículos y otras sorpresas. No os preocupéis si no sois demasiado hábiles al principio, porque obtendréis puntos por casi todo lo que hagáis -ya sean acciones defensivas, goles, recuperaciones…-.

Lo mejor::

Es una locura jugable, muy original.
Diversión 100% asegurada

Lo peor::

En solitario es algo limitado.

Conclusiones:

Rocket League es una original propuesta arcade que mezcla partidos de fútbol con carreras a tota marcha. La fórmula es extremadamente sencilla y es precisamente por eso, por lo que gusta tanto. Ideal para los más peques, pese a que algún adulto pasará un buen rato.

Firma: J. Carlos Amador