Mortal Kombat 11

La crítica del principiante Dentro del género de la lucha, encontramos todo tipo de juegos, más o menos violentos y explícitos. Hoy analizamos la nueva entrega de la polémica saga Mortal Kombat. Simplemente, desagradable.

Violencia gratuita y explícita

Hablar de Mortal Kombat es hacerlo de los fatalities, es decir, de los ataques definitivos o especiales de cada luchador. Estos podemos ejecutarlos antes de acabar con nuestros rivales y son lo más desagradable, grotesco y dantesco que hemos visto en años. Algunos nos permiten abrir en canal al rival, sacarle las vísceras e introducir una bomba en el estómago. Otros, patear la cabeza del oponente y atravesarla con un gancho… Son solo algunos ejemplos, pero sirven para ilustrar qué vamos a encontrarnos.

Insistimos, no se trata simplemente de criticar la violencia de un juego de lucha, sino de remarcar encarecidamente la gratuidad y salvajismo de muy mal gusto de este título. Tampoco podemos olvidar que las historias de algunos personajes son discriminatorias y han sido tildadas de “racistas”.

¿Qués el Mortal Kombat? Datos básicos:

Mortal Kombat 11 es un clásico arcade de lucha en 2D (nos movemos de izquierda a derecha) con una jugabilidad muy básica y fluida, donde cada golpe enlaza con el siguiente, permitiéndonos realizar combos de lo más complejos y variados, sin demasiada dificultad. Si lo comparamos con Injustice 2 –juego de los mismos creadores pero basado en superhéroes-, aquí el ritmo es más ágil.

Asimismo, disponemos de un medidor de ataque y otro de defensa que se van recargando a medida que realizamos movimientos. Esto aporta un componente estratégico interesante, porque si aporreamos botones sin ton ni son, podemos quedarnos sin la posibilidad de defendernos o atacar cuando más lo necesitemos. Otra de las novedades son los golpes devastadores, que se activarán cuando realicemos una secuencia de ataques concreta. Si los ejecutamos correctamente, nos permitirá infligir más daño en el oponente y realizar un taque especial vía rayo X que nos permitirá ver cómo rompemos sus huesos.

Lo mejor:

Ágil de jugar…

Tremendamente violento, gore y sumamente explícito.

Conclusiones:

Mortal Kombat 11 es un arcade de lucha para nada aconsejable. Poco importa si es mejor o peor gráficamente o si es un producto más o menos completo.