Treasure Rangers

La crítica del principiante 

El objetivo primordial de este título es normalizar la situación de personas con diversidad funcional. En concreto, Treasure Rangers nos habla de un trastorno tan complejo como el TEA (Trastorno del Espectro Autista) y lo hace desde la sencillez y la normalidad. Desarrollado en colaboración con la Asociación Española de Autismo y dentro del programa PlayStation Talents de Sony, esta aventura nos presenta a cuatro protagonistas, uno de los cuales tiene TEA. Lo mejor es que el título no pretende que lo tratemos como alguien distinto, sino que, al igual que sus otros tres amigos, posee unas habilidades únicas, pero también unos puntos débiles concretos. Es precisamente la colaboración entre los personajes el punto esencial que nos permite avanzar en la partida y demostrarnos que cada persona tiene unas potencialidades diferentes. 

Una aventura muy plataformera

En esencia, se trata de un título de plataformas enfocado hacia el público más infantil. Disponemos de cuatro personajes: Randy (el niño con TEA), Lucy, Eric y su hermana, Roxy. Como decíamos, cada uno posee unas características únicas. Randy puede saltar más alto que ninguno, Roxy puede usar el doble salto… La gracia reside en cambiar de uno a otro constantemente para superar los obstáculos y vencer a los enemigos. 

Puntos de mejora 

Pese a que es de alabar su planteamiento e iniciativa, tanto el apartado técnico de los personajes como en los escenarios y enemigos es muy justito. En una pantalla portátil pasaría algo más desapercibido, pero en PS4 hace aguas. Esto hace que, en lo estrictamente jugable, pierda puntos. No olvidemos, eso sí, que va dirigido a los más pequeños. 

Lo mejor: 

La iniciativa de la que parte.

Combinar los cuatro personajes. 

Lo peor: 

Apartado técnico desfasado años luz. 

Conclusiones: Treasure Rangers es una iniciativa de alabar tanto por el estudio que lo ha realizado como por la propia Sony, que da luz a este tipo de proyectos en el programa Talents. Quizás un mayor tiempo de desarrollo o mayor presupuesto hubieran mejorado el resultado final.