Luigi protagoniza esta aventura terroríficamente divertida que encantará a niños y a adultos.
La crítica del principiante
Luigi’s Mansion debutó en la consola Game Cube en el lejano 2002. Aquella simpática aventura, cargada de acertijos y exploración, tuvo continuidad en 3DS con una fantástica entrega en la que visitábamos cinco mansiones encantadas. Ahora, la saga debuta en Switch con una trepidante tercera entrega.
Exploración terrorífica
Todos merecemos unas buenas vacaciones. Precisamente esto es lo que se propone el bueno de Luigi en un glamuroso hotel. A su llegada, todo parece en orden. Sin embargo, a la mañana siguiente el hotel está muy distinto. Ha perdido todo su encanto y lo que es peor, Mario, Peach y compañía han sido secuestrados. Bueno, lo cierto es que han sido convertidos en cuadros. Pero tranquilos, no hay que temer. Luigi está aquí y está dispuesto a resolver este desaguisado.
Luigi’s Mansion 3 es un título que mezcla con gran destreza plataformas, puzles y exploración a partes iguales. Armados con nuestra aspiradora y una linterna, deberemos recorrer las numerosas estancias del hotel en busca de nuestros amigos. Cada planta funciona como un nivel independiente, con un “enemigo” fantasmal al que derrotar. Así, por ejemplo, en una planta nos espera el teatro, donde nos enfrentaremos a un fantasma muy vivaldiano. En otra, tendremos el restaurante y la cocina. Ahí tendremos que hacer frente a todo un Masterchef.
A medida que derrotemos a estos fantasmas, conseguiremos los botones del ascensor que nos permitirán acceder a nuevas plantas. Pero no todo es tan sencillo como parece. Para llegar a enfrentarnos al fantasma jefe de cada nivel, primero deberemos explorar todas las habitaciones, repletas de detalles y acertijos.
Gracias a nuestra aspiradora podremos, por ejemplo, hacer aparecer objetos ocultos o accionar mecanismos que funcionan con luz. Y, por si fuera poco, contamos con una nueva habilidad: GomaLuigi. Se trata de de una réplica nuestra hecha de un material gelatinoso y que tendrá la habilidad de atravesar verjas y tuberías para acceder a zonas ocultas.
Y, aunque la dificultad media es bastante baja, es precisamente en la exploración donde reside la gracia para conseguir todas las joyas ocultas de cada nivel y así completarlos por completo.
Arte nintendero
Luigi’s Mansion 3 rebosa arte y colorido en cada estancia. Los detalles de los escenarios, los muchos guiños a las anteriores entregas y el colorido visual, forman un cóctel que encantará a cualquier usuario de videojuegos. Además, el hecho de que cada planta sea completamente distinta, hace que nos sorprendamos como si hubiéramos acabado de comenzar.
También para dos jugadores
Otro de los puntos fuertes del juego es la posibilidad de jugarlo en cooperativo, ya que un jugador controla a Luigi y el otro a GomaLuigi. Esto hace que ambos personajes se tengan que compenetrar para poder avanzar.
Y, por si el juego nos parece corto, tenemos la Torre de los Desafíos, una modalidad online en la que tendremos que superar numerosos niveles repletos de trampas. Para salir victoriosos, el trabajo en equipo será esencial.
Lo mejor:
Originalidad, grado de detalle… TODO.
El juego es largo y muy variado.
La Torre de los Desafíos aporta un extra muy interesante.
Lo peor:
Podría incorporar algún otro nivel de dificultad.
Conclusiones:
Luigi’s Mansion 3 es arte hecho videojuego. Estamos ante uno de los juegos del año. Uno de esos con el que disfrutará tanto un niño de 8 años como un adulto de 35. La sabia mezcla entre plataformas, puzles y exploración supone todo un acierto. Y si queremos conseguir el 100% del juego, dedicaremos unas cuantas horas.
Luigi vuelve a protagonizar una aventura repleta de misterio, exploración y algún que otro susto. Aspiradora en mano, el hermano de Mario debe rescatar a sus amigos y resolver los enigmas que encierra un extraño hotel. Os presentamos Luigi’s Mansion 3.
