La serie se estrenó el 3 de noviembre del 2009 a la cadena norteamericana ABC, gracias a un nuevo desarrollo del argumento original por parte de Scott Peters (creador de 4400) y presente en otros proyectos también de ciencia ficción como Terminator: The Sarah Connor Chronicles o Jericho. La serie original (1983) fue ideada por Kenneth Johnson, un habitual de formatos en la misma línea.
TV3 parece que ha hecho un agujero los jueves a productos sci-fin (Héroes, Las crónicas de Sarah Connor) o de sello serio norteamericano (Damages, Fiscal Chase). A pesar de que pueden llevarse parte de la audiencia de la exitosa Polònia, se trata de series con un público determinado y que exigen un seguimiento semanal por la estructura de los capítulos. De momento, se agradece su presencia.
En cuanto a la nueva V, Los visitantes, hay que decir que arranca con una multi-paralela presentación de personajes que, a pesar de no ser excesivamente original, sabe dinamizar las tramas con múltiples conflictos. Además, las sorpresas, algunas ya preparadas pero escondidas en la medida adecuada, rematan bien la jugada del suspense.
Visualmente no se puede negar que el nivel es satisfactorio, teniendo en cuenta que también juega la baza de flirtear con la apariencia de serie B, que acompañó el original y tantas otras series de ciencia ficción. En esta línea, la visión apocalíptica de mundo, propia del cine que siempre triunfa en la gran pantalla, es parte del espectáculo de los lagartos.
Argumentalmente, la serie de la ABC hace una crítica escondida al culto de la belleza externa en la sociedad actual, pues muchas veces, como con la Anna o Lisa, la gente se fía de alguien solo porque es atractivo. Por otro lado, acierta los temas de siempre como el racismo y mestizaje, amistad, conflictos familiares, el papel de la Fe. Sobre esto último, la figura del padre en crisis es también un nuevo cliché que no profundiza en ninguna cuestión interesante, como sucede con el problema de conciliación familiar de Erica. Y es que todo está demasiado prefigurado: la policía, la prensa, la religión y la adolescencia.
Esperamos que la continuación de la serie desvele estrategias más sorprendentes y creativas para ser un entretenimiento familiar, o al menos juvenil.
Warner también era quién tiene que crear el videojuego oficial, que ha encargado a Jason Hall (F.E.A.R. en Xbox 360 y Playstation 3).
Firma: Lourdes Domingo
Los visitantes ya están aquí. Los tenemos entre nosotros. Aparecen simultáneamente en todas las grandes ciudades del planeta y llevan un mensaje de paz. Quieren compartir sus conocimientos tecnológicos y una idea de unidad, evitando que las fronteras o el miedo nos dividan. Quieren que nos congreguemos. Y, para conseguirlo, apelan a un aspecto determinante de la condición humana: la devoción.
Los visitantes, que de entrada son vistos como una amenaza, rápidamente se convierten en objeto de admiración y en un vínculo con todo aquello que queda fuera de nuestro alcance. Para el adolescente Tyler (Logan Huffman), presentan la oportunidad de formar parte de una cosa grande, que ofrece esperanza, un convencimiento que todavía refuerza más la atractiva visitante Lisa (Laura Vandervoort). Para Chad (Scott Wolf), un ambicioso presentador de noticias, la entrevista en exclusiva con Anna (Morena Baccarin), la primera de los visitantes, es vital para encabezar todos los índices de audiencias. El padre Jack (Joel Gretsch), un cura de fe dudosa, no acaba de creer en la rectitud de los visitantes y decide ir en busca de la verdad fuera de la iglesia.
Hay otros disidentes que también desconfían de lo que dicen de que son los visitantes, como por ejemplo en Ryan (Morris Chestnut), que se ve obligado a tomar una decisión que le cambiará la vida cuando aparecen, decisión que podría llegar a afectar a su novia, Valerie (Lourdes Benedicto). Y cuando la agente de la brigada antiterrorista del FBI, Erica Evans, (Elisabeth Mitchell) descubre, investigando la formación de una célula terrorista, qué hay en realidad detrás de la apariencia tan sorprendentemente humana de los visitantes, nada será más importante que hacer frente a este nuevo mundo, puesto que todo está en juego. Sin duda, empieza a despuntar un nuevo día.
