Tierra de lobos es una ambiciosa producción de Telecinco, en colaboración con Ida y Vuelta y Multipark Ficción, ambientada a finales del 1800. Entre el western, el drama y el romance la historia se desarrolla en un paraje seco, duro y polvoriento, adjetivos que también pueden aplicarse a sus habitantes.
Destaca, en esta ficción, el rodaje en alta definición y en exteriores, el presupuesto invertido y la fotografía, cuatro aspectos nada desdeñables, pero insuficientes. Como en otras ocasiones en las que se ha puesto demasiado empeño en la parte técnica y visual, se ha dejado de lado el guión, el ritmo, los diálogos y un largo etcétera de detalles que conforman el buen producto.
Para empezar, el guión deambula entre demasiados géneros sin sacar lo mejor de cada uno de ellos. El western se torna poco creíble cuando los “machotes” sienten la necesidad constante de enseñar, además de las pistolas, sus trabajados músculos. El drama es irrisorio cuando una herida de bala casi mortal desaparece al día siguiente o la enfermedad de la tuberculosis no afecta al enfermo. El romance se aproxima más al deseo sexual de los protagonistas que a una historia de amor apasionada y profunda. Y, para acabar, la acción se centra en momentos demasiado puntuales y típicos. En general todo es un poco previsible.
A lo anterior, o mejor dicho, consecuencia de lo anterior, el ritmo padece anomalías. No es un obstáculo plantear una historia menos acelerada de lo que estamos acostumbrados a ver, tanto en la gran pantalla como en la pequeña. No obstante, el espectador espera que, en el desarrollo de la cinta, se aporte información con más o menos regularidad e intensidad. En este caso, sobreabundan las escenas y los diálogos que no añaden y, más bien, entorpecen el hilo argumental.
Entre los personajes no se encuentra ni novedad, ni originalidad. Se trata de un conjunto de hombres y mujeres marcados por una historia que hacen exactamente lo que el espectador espera que hagan en cada momento.
A este intento de serie de época se le puede reconocer un buen trabajo de ambientación y vestuario pero, también se le debe llamar la atención sobre el vocabulario utilizado, más propio del siglo XXI que del XIX. Y, como no puede faltar en la producción nacional, las escenas de cama, burdel, o establos son un recurso fácil y resultón al que se agarran los guionistas de esta ficción costosa, pero prescindible.
Firma: Mar Pons
Género: Serie
Subgénero: Drama
Año: 2010
Cadena: Telecinco
Intérpretes: Adriana Torrebejano, Álex García, Antonio Velázquez, Dafne Fernández, Juan Fernández, Junio Valverde, María Castro
Presentador: -
César (Álex García) y Román (Junio Valverde) no han tenido una vida fácil. Son dos hermanos huérfanos que se han visto obligados a delinquir desde muy pequeños para poder sobrevivir. Es precisamente en su último atraco cuando, al frustarse la operación, acaban refugiándose en una cabaña que guarda el secreto de sus raíces familiares. A partir de este momento, César, ejerciendo de hermano mayor, cambia totalmente su cáracter para poder asentarse y llevar una vida mejor.
Sin embargo, los protagonistas deberán enfrentarse a la ira del terrateniente del pueblo en el que aterrizan contra quien defenderán con uñas y dientes su nueva propiedad. Esta cabaña guarda un secreto que los hermanos Bravo custodiarán hasta la muerte.
Título original: Tierra de lobos
Creador: -
Director: Jorge Torregrossa, Norberto López Amado
Guión: Juan Carlos Cueto, Rocío Martínez Llano
Productora: Telecinco
Duración: 80'
País: España
Temporada: 1