Don Matteo

Don Matteo es el personaje que da vida a esta serie familiar en la que, al estilo de clásicos como el detective Colombo o la Sra. Fletcher, el protagonista da con la solución gracias a su poder deductivo, a su capacidad de observación y, por qué no, a un factor llamado suerte. Al igual que sus predecesoras Don Matteo debe convencer por su protagonista, papel que encarna el veterano Terence Hill en un registro muy diferente al de sus anteriores interpretaciones.

Don Matteo no utiliza la violencia, sino la amistad y la comprensión para “desarmar” al sospechoso y conseguir su confesión. Con su inseparable bicicleta, este sacerdote de pueblo llega a los lugares más recónditos y más oscuros del ser humano, cuyas debilidades, errores, anhelos y desesperanzas son el detonante de las tramas.

No hay que esperar de la serie una gran ficción que estimule el intelecto ni sobresalga por la calidad técnica. De hecho, esta producción italiana adolece de todo tipo de recursos modernos y de ambiciones estilísticas o formales. Don Matteo se complace en narrar historias con valores familiares y sociales en una época en la que desentonan ciertos modelos y, en especial, cualquier referencia religiosa bienintencionada en televisión.

Firma: Mar Pons