Oveja karateca

Crítica Oveja karateca

Análisis

Relatos de siete minutos protagonizados por un lobo, dos ovejas y su bobo rebaño. Con Oveja karateca nos aseguramos algunas risas, ideas creativas y muchas sorpresas.


Cuando empezamos a ver Oveja karateca no podemos evitar pensar en la conocida Oveja Shaun. Además de los lanudos protagonistas, ambas series también comparten otra similitud, y es que los animales se comunican únicamente a través de expresivos sonidos.

Realmente solo tenemos tres personajes: el lobo –que no siempre es tan malo– y dos ovejas con mucho ingenio. El resto del rebaño funciona como receptor de los desastres o locuras producidas por los tres principales.

Esta animación encaja perfectamente con el género del slapstick. La torpeza del lobo y los movimientos de nuestra oveja karateca –siempre con la idea de proteger al rebaño– están constantemente presentes.

Pero, lo mejor de esta propuesta es, sin duda, que estos impactos van acompañados de soluciones muy imaginativas y artilugios de lo más inesperados que harán sonreír a pequeños y mayores.

Firma: Júlia Nafría

ficha técnica

Género: Animación

Subgénero: 3D

Año: 2022

Cadena: Netflix

Intérpretes: -

Presentador: -

Público

+7 años

Valoración

Contenido

Humor

Acción

Violencia

Sexo

Dos ovejas protegen a su rebaño de un astuto lobo decidido a comérselas. Para ello, se sirven del kárate y de una serie de sofisticados artilugios que almacenen entre la lana de su cuerpo.

Título original: Karate sheep

Creador: Hugo Gittard

Director: Cédric Dietsch, Renaud Martin

Guión: -

Productora: Xilan Animaton

Duración: 7'

País: Francia

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