One piece

Eiichiro Oda es el creador de los más de cien mangas y mil capítulos de anime que narran las aventuras de Monkey D. Luffy y su tripulación. Ahora, Netflix los adapta y nos invita a conocer a los personajes en carne y hueso.

Los fans de la saga apreciarán el gran parecido visual que se da entre la animación y la propuesta del live action. Hay que reconocer que se ha hecho un gran trabajo en la elección de los trajes, caracterización de los personajes e imitación de las escenas emblemáticas. Aunque quienes conozcan el argumento, apreciaran los notables cambios.

En este mundo de fantasía, hay un tema constante: la amistad. Los lazos que pretende forjar Luffy con su tripulación van más allá del simple compañerismo. Esto va acompañado de gags y una sonrisa constante en el rostro protagonista.

Pero no podemos obviar que se trata de una serie violenta. La sangre, las heridas, las armas y los ataques aparecen constantemente en pantalla, detalle que podrá incomodar a algunos.

Con esto, el live-action de One Piece ha resultado ser una versión más amable, comercial y mucho menos hipersexualizada de las aventuras de Luffy. Esto, sin duda alguna, permite que lo disfrute un público bastante más amplio que su predecesora animada.

Firma: Júlia Nafría