Algunos datos
A lo largo de los últimos años, los casos de ciberbullying se han ido incrementado. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), España es uno de los países en el que más se da el ciberacoso. Ya en 2019, Fundación ANAR y Mutua Madrileña publicaron un informe y elaboraron una infografía con algunos datos relevantes:
– Uno de cada cuatro casos de acoso escolar se da en la red y, al llegar a la ESO, ya son dos de cada cuatro
– Las chicas sufren más ciberacoso que los chicos (70% y 30% respectivamente)
– El 75% de los casos se da a través de WhatsApp
– La mayoría de los niños no piden ayuda y, aunque el 75% de los profesores toman alguna medida, las víctimas y familias consideran que no es suficiente
– Un 30% de los casos de ciberbullying van unidos a agresiones físicas
Si el ciberacoso ha aumentado tanto en número, muchas veces se da a que los niños tienen smartphones cada vez a edades más tempranas. Por esto, antes de comprar un teléfono a nuestros hijos debemos pensar: el móvil ¿un problema o una oportunidad?
¿Qué es y qué formas adopta el ciberacoso?
El bullying es una persecución tanto moral como física, siempre piscológica, que se da en entornos educativos donde uno o más niños ejerce abusos de poder sobre otros. (Descargar infografía.) El ciberacoso es la evolución con la llegada de internet, las TIC y su utilización por parte de los menores. Los casos se han incrementado todavía más con la aparición de los smartphones, adquiridos cada vez a edades más tempranas.
Con el tiempo, se ha convertido en un acoso con características propias totalmente diferenciadas del tradicional: inmediatez, anonimato (no siempre) y presión sobre la víctima en cualquier momento del día, no solo durante el horario escolar. Las formas en las que se da el ciberbullying son muy variadas:
1. Rumores: publicación o envío de comentarios crueles para dañar la reputación y las relaciones de una persona con su entorno más cercano. Actualmente, el 24% de los jóvenes afirman que alguien ha escrito algo negativo sobre ellos en alguna red social y el 21% de los adolescentes, que alguien ha difundido rumores falsos sobre ellos a través del email o WhatsApp.
2. Exclusión: acción de dejar deliberadamente a alguien fuera de un grupo online para que se sienta rechazado.
3. Suplantación: irrupción en el correo electrónico de alguien o en sus cuentas de redes sociales (Instagram, Facebook, Snapchat, TikTok…) y envío de mensajes que causan vergüenza o daños a la reputación de la persona y afectan su relación con los demás. Uno de cada veinte jóvenes dice que alguien ha suplantado su identidad creando una cuenta falsa en redes sociales.
4. Acoso: publicación o envío repetido de mensajes ofensivos, groseros e insultantes a una persona.
5. Flaming: término que se usa para designar las peleas online en las que se publican mensajes despectivos y ofensivos en sitios web, foros o blogs.
6. Extorsión: engaño a una persona para que revele secretos o información vergonzosa que luego se comparte online sin consentimiento y para causar daño.
7. Amenazas: publicación de comentarios en internet que amenazan o denotan un comportamiento violento.
Firma: Júlia Nafría