Llega el renacer de los videojuegos clásicos. Somos muchos los que hemos crecido con los videojuegos. Los míticos Mario, Sonic y compañía han sido nuestros compañeros de viaje a lo largo de muchos años. Lógicamente, con el tiempo tanto la tecnología como los gustos han variado. Los gráficos se han vuelto cada vez más realistas y ahora imperan modas como el Battle Royale de Fortnite, el multijugador de Call of Duty o el Ultimate Team de Fifa.
Sin embargo, parece que los más mayores todavía tenemos mucho que decir. Desde hace unos años se está produciendo un auge en el videojuego antiguo, tanto a nivel coleccionista como para jugar. Para entender esta tendencia, hay que remontarse a la anterior generación de consolas, es decir, cuando PS3 y Xbox 360 estaban en plena efervescencia. Con ellas surgió el fenómeno indie. Este, también llamado independiente, consiste en juegos simples, creados por pequeños equipos de desarrollo, que ponen el énfasis en una jugabilidad directa, divertida y sin complicaciones. Así nace, por ejemplo, Minecraft. Un juego con gráficos pixelados basado en un universo de cubos donde la imaginación es nuestro único límite. Nadie esperaba el inigualable éxito del juego creado por Mojang, pero lo cierto es que ha vendido millones y millones de copias.
El juego indie ha sido toda una revolución. estudios pequeños crean propuestas muy originales basadas en una jugabilidad sencilla, directa y muy divertida frente a los altos presupuestos de las grandes compañías.
A este le han seguido juegos de todo tipo: Guacamelee, Limbo, Super Meat Boy, Salt & Sanctuary, Volume y un largo etcétera. Costes bajos, distribución digital o con tiradas físicas limitadas y una gran legión de fans. ¿Se puede pedir más?
Es aquí donde el videojuego retro empieza a aparecer. Primero es por un tema de nostalgia y coleccionismo. ¿Cuántos no hemos deseado volver a tener los juegos de nuestra niñez? Aquellos míticos Knights of the Round, Streets of Rage, Shinobi, Castlevania, Tombi… Podríamos poner una lista interminable en cada plataforma. Pero no nos engañemos, coleccionar es difícil, caro –según qué juegos y en qué estado los queramos- y muy laborioso.
Por ello, las compañías han encontrado un filón reeditando sus clásicas consolas a un precio más que competente (os dejamos un enlace a una noticia interesante sobre el auge de ete tipo de juegos). Dispositivos que nos permiten jugar a aquellos clásicos de hace décadas de manera fácil y rápida.
¿Queréis conocer cuáles son las más recomendables?
Super Nintendo Mini: la reedición de la mejor consola de todos los tiempos (igual es algo osado definirla así…) incluye 21 de sus mejores juegos. Algunos son tan imprescindibles como Zelda: A link to the Past, Castlevania IV, Secret of Mana, Super Metroid o Megaman X. Incluye, además, StarFox 2, un título que nunca llegó a salir y que debuta más de veinticinco años después. Pero si entre todos los juegos tenemos que elegir uno, este es, sin duda, Súper Mario World. La mejor aventura de Mario de cuantas se hayan hecho –con permiso de Mario 64-. Los 96 niveles en 2D son una auténtica maravilla. Diversión asegurada con una dificultad creciente que supone todo un reto y el encanto de toda la vida.
Nintendo Mini (NES Mini): la primera consola de Nintendo también se reeditó hace dos años, siendo todo un éxito de ventas y agotándose completamente a los pocos meses. Tal ha sido el éxito que Nintendo la ha relanzado hace escasas semanas para satisfacer el ansia de los usuarios. Juegos como los Super Mario Bros originales, Ninja Gaiden, Excitebike o Double Dragon II son una auténtica gozada.
Sega Megadrive Mini: siguiendo la estela de Nintendo, Sega ha decidido licenciar sus productos. Pese a que ya habían salido unos cuantos modelos basados en Medagrive, ahora ya son oficiales. Grandes títulos como los Sonic, Altered Beast o Alex Kidd harán las delicias de los muchos fans de Sega.
Atari Flashback: la mítica Atari tuvo muchos modelos, siendo, quizás, la 2600 la más recordada. Esta nueva consola nos permite jugar a grandes clásicos de la compañía como Tempest, Adventure, Asteroids o Missile Command. Por otro lado, Commodore 64 también se ha reeditado hace unas pocas semanas.
Y lo que está por venir…: el indiscutible éxito de las tres consolas comentadas nos hace pensar que serán muchas las compañías que sigan sus pasos. Sony, de momento, no ha movido ficha, pero una PS1 mini sería del agrado de los fans. Nintendo parece que se animará con Nintendo 64 mini, otra de sus consolas clásicas. Eso sin contar con una futura Gameboy mini –que sería increíble- o GameGear mini…
¡Gran futuro al juego retro!