Una historia emotiva, sensible y delicada. En su tratamiento de las dificultades en las relaciones materno-filiales y cómo los recuerdos son olvidados, subyace un mensaje de perdón y redención.
Una historia emotiva, sensible y delicada. En su tratamiento de las dificultades en las relaciones materno-filiales y cómo los recuerdos son olvidados, subyace un mensaje de perdón y redención.
Bella propuesta de la directora japonesa de Aguas tranquilas y Una pastelería de Tokyo que resulta, sin embargo, demasiado críptica y confusa.
Naomi Kawase plantea una historia de amor y una reflexión sobre la mirada que arranca con la fuerza y sugerencia habituales de su cine. Sin embargo, su desarrollo se queda en correcta (aunque eso, a veces, no es poco).
A mediados del siglo XX, los aires de cambio que soplan en el país empiezan a sentirse en el dominio de Unasaka, un pequeño feudo […]