
El extraño mejunje te terror y drama romántico deja un título desagradable y tierno a la vez que no gustará a todos los públicos. No obstante, sus protagonistas hacen un trabajo inmejorable que atrapará al espectador hasta el final.
El extraño mejunje te terror y drama romántico deja un título desagradable y tierno a la vez que no gustará a todos los públicos. No obstante, sus protagonistas hacen un trabajo inmejorable que atrapará al espectador hasta el final.
El color del cielo invita al espectador a reflexionar sobre la búsqueda obsesiva de la felicidad. El planteamiento es interesante, la puesta en escena impecable, pero el mensaje puede quedar poco claro.
Vuelve una de las relaciones amorosas más inmaduras y poco apetecibles de los últimos años. Josephine Langford y Hero Fiennes-Tiffin protagonizan de nuevo esta historia solo imaginable sobre el papel o en celuloide.
Este musical protagonizado por Karla Souza y Raúl Arévalo rinde homenaje a los Hombres G. Es fresco, divertido, cuenta con grandes interpretaciones y, sin duda, logra arrancar una sonrisa a la audiencia de todas las edades.
La película expone la tensión que vivió Mali tras su independencia. La ambientación, la música y la exposición de las relaciones humanas en esa sociedad dividida entre la tradición y la revolución está bien lograda.
El film no es un homenaje a Bergman ni pretende imitar su obra. Es cine dentro del cine, con una segunda trama que rompe el ritmo sin aportar nada. Al final deja la sensación de estar perdida en sus reflexiones.
Esta secuela es un producto para deleitarse en escenarios del pasado durante un rato y compartir la felicidad de los sueños cumplidos de sus personajes. Repite la mayoría del elenco y cuenta con muchos toques de humor.
El film de Juho Kuosmanen puede desalentar al principio, pero rompe los estereotipos de dos personajes excéntricos mientras construye una bonita relación a través de un viaje de transformación personal.
La obra de Balzac llega a la gran pantalla con magníficas interpretaciones y decorados pero interrumpida por escenas de sexo y algo de desesperanza. Aún así, es ágil, divertida y propone una reflexión bastante actual.
Este drama inglés de época con giros excesivamente sensuales tiene varios aciertos, pero un guion fallido. Aunque las interpretaciones y la fotografía son fascinantes, los personajes y la historia dejan bastante que desear.