
La segunda entrega de la saga Venom rompe récords en la taquilla post-pandemia. El film regresa con acción, buen desarrollo de personajes y un reparto que deslumbra de nuevo en la gran pantalla.
La segunda entrega de la saga Venom rompe récords en la taquilla post-pandemia. El film regresa con acción, buen desarrollo de personajes y un reparto que deslumbra de nuevo en la gran pantalla.
El cierre de Daniel Craig en la saga de James Bond es magistral. Con la misma acción y elegancia de siempre, esta última entrega descubre una versión más personal del agente, cuenta con sorpresas y resulta conmovedora.
“La ley del mar dice que hay que proteger la vida”. Mediterráno es correcta a nivel técnico y, a nivel social, muy necesaria. Transmite la angustia de esta gran crisis humanitaria que inunda el mar Mediterráneo.
Navot Papushado hila una serie de clips violentos con mucha acción, neones y unas actrices que han disfrutado con el proyecto. Pero fuera del magistral contenido visual, el film carece de argumento lógico y personajes definidos.
Una película llena de acción, aventuras y diversión con D’Artacán y los Mosqueperros, perfecta para sorprender y divertir a los más pequeños, así como para despertar, a los no tan pequeños, un bonito recuerdo.
Adam Robitel dirige una secuela llena de acción que llega a grandes extremos, aunque poco original. Con un planteamiento interesante y una magnífica ambientación, consigue despistar y jugar con la mente del público.
Una película bien ejecutada aunque muy violenta. Inspirada en el mundo narrativo de Escuadrón Suicida, recupera a personajes como Harley Quinn y Amanda Waller, pero ojo: no es una continuación del film de 2016.
La película de Disney para verano no tiene grandes defectos, pero tampoco es un producto estrella. Mezcla comedia, acción, aventuras, un relato sencillo, un buen elenco y buena producción. Lo justo para gustar sin apabullar.
Años después, llega la secuela de Space Jam. De nuevo, se trata de una película híbrida entre imagen real y animación, con un argumento simple que entretiene y hace reír: un film para hacerse un poco niño otra vez.
Jensen firma un thriller con humor negro que engancha hasta el final y que es más profundo de lo que parece. Además, permite reflexionar sobre cómo nos afecta el sufrimiento y cómo reaccionamos ante las cosas que nos duelen.