Arthur Rambo sumerge a la audiencia en el mundo de Twitter para plantear una problemática real. Gracias a una correcta actuación protagonista y situaciones límite, invita a una necesaria reflexión sobre las redes sociales.
Arthur Rambo sumerge a la audiencia en el mundo de Twitter para plantear una problemática real. Gracias a una correcta actuación protagonista y situaciones límite, invita a una necesaria reflexión sobre las redes sociales.
François Ozon regresa con una adaptación de la novela de una de sus colaboradoras y amigas. A pesar del tema y del respeto con que aborda a los personajes, el film resulta algo apagado y gélido.
Profunda y entretenida película de Haifaa Al-Mansour donde una médica saudí (protagonizada por Mila Al Zahrani) debe enfrentarse a la sociedad patriarcal en su intento de ser elegida alcalde de su municipio.
Una combinación de escenas muy diversas, inconexas entre ellas, que tratan de reflexionar acerca de la existencia humana. Gestos espontáneos, largos silencios, humor absurdo y tonos pastel remarcan el sello del director.
Poética y divertida disertación sobre las relaciones madre-hija, cine-mentira, verdad y realidad.
Una película más de denuncia social ante las injusticias laborales, con un buen equipo, pero un tono muy sombrío, además de escenas lascivas que, sin aportar nada, contribuyen junto con la simpleza y el sentimentalismo a la inverosimilitud de la historia.
Ken Loach hace un retrato brillante de la situación laboral actual en un largometraje que mantiene angustiada a la audiencia gracias a la magnífica interpretación de unos actores noveles.
El director turco, ganador de varios premios en el Festival de Cannes, ofrece una mirada crítica de la vida, desde el punto de vista de un joven que busca su identidad. Una película para los amantes del cine de festival.
El director y guionista Jia Zhang-Ke introduce al espectador en una complicada trama, donde amor y odio y complicadas situaciones en bandas criminales se aderazan con su habitual manera (tranquila y contemplativa) de observar la realidad.
Ozon relata el caso Preynat con una puesta en escena tan académica y tan centrada en el relato de hechos y reacciones que hace cuestionar la necesidad de la ficción y pensar más en la necesidad de haberlo hecho en formato documental.