Día Internacional de juego, ¿te apuntas a jugar?

Día Internacional del juego

Con motivo del Día Internacional de juego (28 de mayo) queremos resaltar esta actividad que, por otra parte, está recogida como derecho propio de la infancia por la Asamblea General de las Naciones Unidas:

Artículo 31
1. Los Estados Partes reconocen el derecho del niño al descanso y el esparcimiento, al juego y a las actividades recreativas propias de su edad y a participar libremente en la vida cultural y en las artes.
(Convención sobre los Derechos del Niño, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 20 de noviembre de 1989)

Sin duda, en los últimos años, las pantallas han ido sustituyendo las prácticas más tradicionales: los cuentos en papel, los dibujos con colores, pinturas, etc. Pero también han generado un cambio importante en la actividad física de los menores. Es tan significativo el cambio de escenario en el que se desarrollan los niños del siglo actual, que la Asociación Española de Pediatría recuerda que:

Cerca del 12% de los niños entre 5 y 14 años no realiza ejercicio físico, una tendencia que no solo afecta a la infancia, sino que continúa al alza en la vida adulta llegando a superar el 45% entre los jóvenes de 15 a 24 años. Existe una gran evidencia científica en torno a los beneficios que la actividad física tiene para la salud, con la incorporación del ejercicio físico en la rutina diaria, un niño reduce el riesgo de padecer obesidad, mejora su condición física, cardiovascular y ósea, su rendimiento escolar y su estado anímico, además, reduce el riesgo de enfermedad por cualquier causa en edades más avanzadas. (Seguir leyendo en la web)

Y nos propone algunas soluciones fáciles de incorporar a nuestra rutina familiar:

Ejercicio en menores de 5 años 

Para los bebés, la actividad física quiere decir que se les deje mover los brazos y las piernas mientras están acostados en espacios libres. Esto incluye buscar y coger objetos, girar la cabeza hacia los estímulos, tirar, empujar y jugar con otras personas, patear, gatear, ponerse de pie, arrastrarse y comenzar a andar. مواقع لربح المال

Una vez que los bebés sepan andar, la AEP recomienda estar físicamente activos al menos 3 horas al día. A esta edad tiene más valor el tipo de actividad física que la intensidad y ésta puede incluir andar, ir en bicicleta, columpiarse o sesiones con más gasto energético como puede ser correr, juegos de pilla-pilla, saltar, actividades con pelotas y ejercicios en el agua (bañera o piscina). betfinal عربي

Día Internacional del juego

Es fundamental limitar el tiempo delante de pantallas:

De 0 a 2 años, no se recomienda pasar tiempo delante de una pantalla y de 2 a 4 años, la exposición delante de una pantalla no debe ser superior a 1 hora al día.

“El juego es una actividad que proporciona disfrute, distracción y oportunidades para aprender cosas nuevas y practicar habilidades”

Los beneficios del juego infantil son casi innumerables, pero hoy vamos a destacar los más elementales. Es importante saber que los niños aprenden, crecen y se relacionan gracias al juego.

Sus beneficios más inmediatos son:

Desarrollo físico y motriz: contribuye a la maduración nerviosa y estimula la coordinación de las diferentes partes del cuerpo. A través del juego es como se ejercitan la motricidad gruesa y fina y se desarrollan las capacidades sensoriales. betfinal

Desarrollo emocional y social: de esa manera, los más pequeños aprenden a conocerse a sí mismos, a construir su representación en el mundo y también aprenden las normas sociales necesarias para integrarse en la sociedad.

Fomento de la creatividad y de habilidades para la resolución de conflictos: el juego estimula su pensamiento abstracto y se aprende a resolver problemas imaginando posibles soluciones.

Capacidad de esfuerzo y de mejora personal: vivir nuevas experiencias, equivocarse, acertar o llegar a la meta no solo crea zonas potenciales de aprendizaje en el cerebro sino que, además, afianza la autoestima.

Comprensión espacial, lectora y de cálculo: a través del juego es fácil comparar, relacionar, ordenar, clasificar, abstraer, solucionar, deducir, interpretar, representar…

Y, todo esto, ¡pasándolo en grande!

¿Te apuntas? Te invitamos a leer este post: Un verano diferente