Una familia con clase

La película se basa en la obra de teatro de Noel Coward. Coward escribió esta pieza en 1923 y poco después el propio Hitchcock, todavía en su país natal, realizó una adaptación en cine mudo. Ya en sonoro, la versión más reciente hasta el momento había sido Gente con clase (2000). Una versión más aguda y elegante que la actual, y que supuso el retorno a la gran pantalla de Julie Andrews. Además, en Gente con clase, Colin Firth tenía reservado un glorioso secundario, más irónico y divertido que el papel de consorte amargado que interpreta en la versión de Elliott.
 
El director de origen australiano (Las aventuras de Priscila Reina del desierto y Ojos que te acechan) ha adaptado la obra teatral incluyendo posturas y mensajes más contemporáneos. Esas licencias, tan maniqueas que cansan y son algo insultantes, hacen del film un caos reivindicativo, propio de algunos autores contemporáneos que propagan la confusión y la duda como la excelencia del intelecto.
 
Por otro lado, en ella perviven aspectos clásicos. A algo tan universal como la guerra silenciosa o ruidosa entre suegra y nuera, se le suma la crítica a la hipocresía de los restos de rasgos victorianos en la década de los años 20. Sin embargo, a la evidente falta de fundamento de una educación represiva, no se le puede poner como remedio la desinhibición sin una guía clara.
 
Finalmente, aunque la ambientación es excelente, los diálogos que buscan la flema inglesa no dan la talla que se espera y alargan un final que parece que no llega.

Firma: Redacción

Extras DVD:

Idiomas: inglés, castellano, catalán

Subtítulos: inglés, castellano

Tráiler

Ficha artística y técnica

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