Al estilo de aquel inesperado éxito que fue en 1999 El proyecto de la bruja de Blair, Rec quiere descender, bajo capa de film comercial (algo que es de principio a fin), a la expresión de los miedos en estado puro, como hacía el falso documental de Daniel Myrick y Eduardo Sánchez. De hecho, los directores y guionistas de Rec han declarado que “Queríamos encontrar la clave para construir una pesadilla lo más verosímil posible, una experiencia de terror que pudiera vivirse con una implicación más allá de las habituales convenciones del cine”.
Balagueró (Los sin nombre, Darkness y Frágiles) y Plaza (Second name, O.T. la película, Romasanta, la caza de la bestia), especialistas en el género terror, trabajaron juntos en el documental sobre Operación triunfo y saben manejar perfectamente los hilos para crear esa sensación de realidad grabada en tiempo real. Sin embargo, el guión –que por lo menos sabe no alargarse- decae en el decepcionante desenlace y explicación de los hechos, ya que se explicita en exceso y, además, se confía en la casualidad; algo siempre peligroso en el cine. A pesar de su buen pulso, es quizá el histerismo que transmite y la ridícula e incoherente alusión a la religión -recurso tan tópico y manido en el cine de terror- lo que hace que su aproximación al terror humano en estado puro sea algo fallida. Precisamente, la carencia de esos dos elementos fue lo que, en parte, hizo consistente y más verosímil a Blair.
Firma: Lourdes Domingo
Extras DVD:
- Audio: castellano, euskera, inglés y audiodescripción con discapacidad visual
- Subtítulos: inglés, castellano para sordos
- Audiocomentarios de los directores
- Making of
- Material promocional
- Tráiler
- Teaser
- Spot TV
Una reportera y su cámara están haciendo un reportaje en una estación de bomberos con la intención de retratar la profesión, su modo de vida y sus situaciones de riesgo. Pero mientras les acompañan en una de sus salidas nocturnas, lo que parecía una intervención rutinaria de rescate se va a convertir en un auténtico infierno. Atrapados en el interior de un edificio, la pareja de bomberos y el equipo de televisión tendrán que enfrentarse a un horror desconocido y letal. Algo siniestro y maligno que se está extendiendo sin control.
La película, que se estrenó con éxito en el festival de Sitges de este año, ya tiene casi asegurada su remake en Estados Unidos, debido a esa moda de los norteamericanos de rehacer las películas con sus actores para que la vean sus espectadores (como si su público fuera incapaz de asimiliar el cine extranjero).
