Alexander Payne ha partido siempre de novelas para elaborar sus proyectos mejor resueltos y más conocidos. Desde la iconoclasta Election, pasado por la más reflexiva A propósito de Schmitdt hasta su gran éxito oscarizado Entre copas. Con Los descendientes ha hecho lo mismo pero con una variante: Jim Taylor, su coguionista habitual, esta vez se ha mantenido como productor y se han sumado al teclado Nat Faxon y Jim Rash. Ambos son actores que presentan aquí su primer largometraje.
La cinta es muy Payne. Tiene comedia de golpe rápido, mordaz aunque sin caer en el tono despiadado de Election. Ofrece drama personal y familiar de peso, de camino a la tragedia pero sin llegar a ella. Pone en acción personajes bien perfilados y creíbles, en situaciones que podrían parecer forzadas y azarosas. Y una magnífica dirección de actores en unos espacios seleccionados por ser parte integrante del guión, su conflicto y su evolución. Además de todo esto, Los descendientes es, hasta el momento, el título más familiar del director.
Junto a esto convive una voluntad expresa de unir los valores de la vida cotidiana más íntima (como la sinceridad y generosidad en el matrimonio o la implicación en la educación de los hijos) a los más exteriores y globales ligados al planeta (su conversación para que lo disfruten las personas y no sólo las empresas). El trío de escritores sale airoso del trabajo porque demuestran, con naturalidad, el orgánico lazo que liga toda la existencia del hombre. Aunque el film está gustando en circuitos de crítica y distribución más independiente, lo cierto es que Los descendientes complace al público general. Con momentos donde se vierte algo de lágrima fácil en el guión, el libreto se recupera rápidamente bien por la autenticidad dramática de la escena, o por la convincente interpretación del actor o actriz o, definitivamente, por el vuelco del texto al tono más contenido y severo en el juicio de personajes, acciones y emociones.
Reflexiones certeras, dolores compartidos y buen humor.
Firma: Lourdes Domingo
Extras DVD:
- Audio: español, inglés, húngaro, polaco, turco
- Subtítulos: español, inglés, árabe, búlgaro, griego, hebreo, húngaro, islandés, polaco, portugués, rumano, serbio, turco
- Todo el mundo quiere a George: conoce más íntimamente a George Clooney
- Trabajando con Alexander Payne
- El casting
Matt King es un rico heredero de una enorme fortuna territorial en Hawái. Casado, padre de dos hijas y abogado muy ocupado y ahorrador, recibe un duro golpe cuando su mujer entra en coma consecuencia de una accidente acuático. Matt se enfrenta a la educación de sus hijas, ambas en la crisis de la adolescencia y preadolescencia, pero sobre todo tiene que lidiar con una revelación que pone en crisis algunas convicciones y sobre todo la visión que tenía de su familia.
