Las manos de mi madre

La primera novela de Karmele Jaio resultó un éxito editorial, pues los lectores respondieron y la convirtieron en la más vendida durante el Día del Libro de 2006 en Guipúzcoa. Ahora se estrena su adaptación cinematográfica, como una obra sencilla que ha supuesto el debut de Mireia Gabilondo en la dirección en solitario y en un largometraje de ficción, así como de su guionista, Josu Bilbao.

De fotografía, realización e iluminación naturalista y técnicamente precisas, todos estos elementos se dirigen para contar una historia de tono melancólico e intimista. Aunque más ambientada en el presente, las escapadas al pasado de las protagonistas (madre e hija) potencian una nostalgia que, en algunas secuencias, se antoja algo caprichosa y bastante de postal.

Por otra parte, el retrato contemporáneo de cómo la mujer debe hacer compatibles múltiples facetas, y cómo eso se complica aún más cuando emerge la enfermedad de un ser querido, está llevado con verosimilitud pero también excesiva sencillez dramática, muy expositiva. Sin embargo, en medio de todo, el film sabe expresar y poner de manifiesto una jerarquía de valores tan natural, que a veces nos puede parecer obvia, al mismo tiempo que la obviamos con bastante facilidad.

Un relato cercano, con unos actores que hacen a los personajes de carne y hueso, y un canto a la comunicación y a la manifestación de cariño entre seres queridos.

Firma: Lourdes Domingo