Esta película minimalista, basada en un hecho real, es la ópera prima de una jovencísima realizadora: Samira Makhmalbaf, que debuta tras la cámara ayudada por su padre, el director iraní Mohsen Makhmalbaf (Gabbeth), guionista, montador y asimismo co-productor del presente filme. Su hija Samira, actriz en otra película suya (The Cyclist, 1988), ha cursado Cinematografía y dirigido antes dos cortos (Desert, Art Schools), también a caballo entre el cine documental y la ficción. “Al principio -declaró en el Festival de Cannes de 1998, donde fue muy aplaudida su película-, no estaba segura si iba a hacer un documental o un relato. Para mí, el tema era un pretexto para tratar de entender por qué la calle juega un papel tan importante en la integración del hombre en la sociedad. A los niños se les permite que jueguen en la calle, pero a las niñas no. También intentaba descubrir el motivo de que los padres, a pesar de lo que quieren a sus hijos, las mantuvieran encerradas. Además, no entendía que los vecinos del barrio no se hubieran dado cuenta antes de lo que estaba pasando delante de sus narices; o, si lo sabían, por qué mantuvieron una actitud de indiferencia durante tanto tiempo”, concluía Samira Makhmalbaf.
Interpretada por la propia familia que vivió este insólito suceso, la cinta está rodada “al principio en vídeo” con una mirada neorrealista que la hace cautivadora. Ante todo, La manzana es una sencilla indagación del porqué de la intolerancia y la opresión que sufren las mujeres en el mundo islámico. En la película, la joven realizadora muestra cómo un padre -que vive un consejo de la tradición iraní: “Una joven es como una flor; si le da el sol, se marchitará”- es obligado por la ley a liberar a sus hijas, tras doce años de cautiverio, como resultado del eficiente trabajo de una asistente social; personaje que representa el espíritu de la cineasta y los nuevos aires que se respiran ya en Irán (pues la película no ha tenido problemas de censura en su país).
Aunque, a primera vista, La pomme -con este título se ha lanzado en Francia- puede parecer de un filme feminista, una visión atenta ofrece otra lectura. Dejemos que sea el crítico galo Georges Collar quien la resuma mejor: “Preguntarse si estamos ante una película feminista resulta lógico, dado que cuenta la liberación de dos muchachas. Pero es más justo hablar de una película femenina, que defiende con naturalidad la libertad de la mujer y no condena a nadie. No hay víctimas ni verdugos, sino una situación que es preciso modificar por el bien de todos”. De ahí que La manzana evite el fácil tono denunciatorio, para incidir más en el puro lirismo, no exento de un fino sentido del humor, y en la superación de la ignorancia (no mala fe, ni necesidad de imitar a Occidente) por la Cultura y los Derechos humanos más elementales.
De momento, apuntemos un nuevo nombre en el pujante cinema iraní: Samira Makhmalbaf, que bien podría considerarse discípula del maestro Abbas Kiarostami y de su heredero Yafar Panahi.
Firma: Redacció
Director: Samira Makhmalbaf
Guionistas: Mohsen Makhmalbaf, Samira Makhmalbaf
Intérpretes: Azizeh Muhamadi, Ghorban Ali Naderi, Massumeh Naderi, Zahra Naderi, Zahra Saghrisaz
Género: Drama
País: Irán
Fecha estreno: 27/05/1998
Lenguaje: Coloquial
Teherán, años 90. En un barrio humilde de la capital iraní, varias familias denuncian a la Dirección de Asuntos Sociales que un vecino mantiene encerradas a sus dos hijas de 12 años desde su mismo nacimiento. Una asistente social se encargará de la investigación y de liberar a las pobres muchachas.
Título original: The Apple
País: Irán
Duración: 85'
Fecha producción: 1998
Distribuidora: -
Color: Color