Fin de curso (Prom)

Joe Nussbaum ya ha demostrado en su carrera su gusto por las historias juveniles con títulos sin mucho misterio como Una novata para un cuento de hadas. En esta ocasión reúne a un amplio grupo de personajes que cumplen con todos los tópicos y estereotipos de los romances de instituto más sensibleros para desatar, a través de ellos, todas sus pasiones y sueños de juventud. El resultado es muy plano, previsible y pesadamente monotemático, y cualquier espectador que no sea capaz de ponerse en la piel del más soñador de los adolescentes (o, simplemente, sea uno de ellos), se verá superado por este relato azucarado y empalagoso a más no poder.

No puede negarse, sin embargo, que historias como Prom suelen disfrutar de una importante aceptación por parte de un público determinado que vive dispuesto a enamorarse con sus protagonistas. La misma Disney ya lo demostró con obras más mediáticas como High School Musical, que guarda ciertos paralelismos con la película. En este sentido, el film sabe dirigirse a ellos y posee ingredientes para no defraudarlos, así como un tratamiento correcto e inofensivo, aunque simple, de los personajes y sus vivencias. Eso, teniendo en cuenta que se trata de una cinta sobre y para adolescentes, ya es algo.

Firma: Juan Xipell