David Ayer (Corazones de acero, Sin tregua) escribe y dirige la esperada Escuadrón suicida, basada en los personajes de DC Comics, recurrente fuente de inspiración de los estudios de Hollywood en los últimos tiempos.
El escuadrón de malvados está protagonizado por un llamativo elenco de actores como Will Smith, el oscarizado Jared Leto (Dallas Buyers Club), la joven Margot Robbie (La leyenda de Tarzán) o Viola Davis (Criadas y señoras). Todos ellos, además del resto del reparto, en la piel de característicos personajes, aparentemente súper villanos (incluso la Amanda de Viola Davis lo es a su manera). Pero maldad maldad, más bien poca. Tan solo convence Margot Robbie como la loca Harley Quinn y Leto –muy lucido– en sus breves apariciones en el papel del mítico Joker, que promete próximas apariciones en pantalla. Todo lo demás se queda –nunca mejor dicho– en luces de neón. Y Cara Delevingne no tiene madera de Enchantress.
A estos antihéroes (y al film en general) enseguida se les ve la costura entre tanta oscuridad, música a diestro y siniestro y estética sucia. Supuestamente son perturbados asesinos y acaban en malhablados rebeldes que… en el fondo son buenos.
El problema es que no da tiempo a crear una trama sólida y un poco estable entre tanto artilugio y personaje chungo. La película pasa revista a cada componente del squad, con la convenida atención a la estrella Will Smith, para situar al espectador. Por lo demás, Ayer enlaza escenas como sketches e introduce elementos aquí y allá sin desarrollar ninguno. Y eso que material hay para rato, pero está desaprovechado. Tanto como la gran actriz que es Viola Davis.
Además, Escuadrón suicida no aporta nada nuevo al género. Ciudad apocalíptica, protagonistas antihéroes y estética del mundo del cómic con sus debidas referencias a Gotham (y al Batman de Affleck). Demasiada información presentada a modo de flashbacks que sienta la base para la continuidad de la saga pero no consigue enganchar al espectador a la historia.
En fin, moraleja positiva con un plus de sexismo, improperios y vulgaridad, la usual ironía contra el gobierno americano y sus operaciones militares en la sombra y un guión flojo para un fácilmente olvidable blockbuster de agosto.
Firma: Begoña Arribas
Amanda Waller, la oficial de inteligencia de Estados Unidos saca de la cárcel a los villanos más peligrosos para formar un grupo secreto. Ellos son los elegidos para derrotar la nueva amenaza alienígena que puede destruir el mundo. Pero algo se interpone en su camino. La arqueóloga June Moon, poseída por una bruja maligna llamada Enchantress está aniquilando ciudadanos y convirtiéndolos en su ejército imbatible.