Electrick Children es un film plenamente contemporáneo en todos los sentidos posibles. La directora utiliza resortes literarios, estéticos, religiosos, se atreve con grandes dosis de metalenguaje y arrastra al espectador hacia sombras y dudas de inquietante naturaleza.
Sirviéndose de un guión astuto y aparentemente absurdo, Rebecca Thomas expone en 96 minutos de metraje un tema difícil, revisitado en infinidad de películas, pero nunca abordado de una forma tan elíptica. Ni se ve, ni se nombra pero planea durante el último tramo del film y se desvela justo antes de los créditos, momento en el que adquiere todo su sentido. Esta especie de thriller místico-religioso clava sus zarpas y hiere porque relata la manipulación de la conciencia de una adolescente, hilando el discurso a partir de la incomprensible actitud de la protagonista.
Su visionado requiere paciencia, cultura y una buena mano de psicología pues, al desvelar la trama tan al final, la realizadora pone en peligro la resistencia del espectador en la sala. Galardonada en el Festival de Cannes con la Cámara de Oro, cumple todos los requisitos de los siempre favoritos Bergman, Hanneke y Von Trier aunque de algún modo los supera al invertir en sutileza lo que otros invierten en crudeza.
Firma: Anna Puigarnau
Director: Rebecca Thomas
Guionistas: Rebecca Thomas
Intérpretes: Julia Garner, Liam Aiken, Rory Culkin
Género: Drama
País: EE.UU.
Fecha estreno: 12/12/2014
Lenguaje: Coloquial
Rachel, una joven de 15 años vive con su familia en una comunidad mormona de Utah sin contacto con el mundo. Su universo se reduce a los suyos y a una vivencia profunda de su religión. Tras escuchar clandestinamente una cinta de rock, cree haberse quedado embarazada del cantante y abandona la comunidad para ir en busca del padre de este hijo concebido de forma tan milagrosa.
Título original: Electrick Children
País: EE.UU.
Duración: 96'
Fecha producción: 2012
Distribuidora: Paycom Multimedia
Color: Color