Dentro de la filmografía del director australiano, Robert Luketic, nacido en Sidney, son dignas de mención El chico de tu vida (2004), 21 Blackjack (2008), The ugly truth (2009) y Killers (2010). Ahora vuelve por sus fueros con esta nueva historia de espionaje industrial relacionado con un tema de máxima actualidad tecnológica: la intercomunicación global a través del móvil y los sofisticados tejemanejes empleados algunas compañías norteamericanas para adelantarse a sus más directos competidores.
Los inicios de la película, con la consabida panorámica del atractivo “skyline” de Manhattan, óptimamente filmado y una vistosa escenografía ambiental, prometen bastante más de lo que finalmente ofrece esta nueva cinta de Luketic. Una vez situados en el tema principal y reforzada la lista de créditos con nombres como Oldman, Harrison Ford y Richard Dreyfuss para mayor realce de la producción, la cinta decae profusamente, repitiendo escenas, persecuciones y planos y contraplanos basados en la aplicación de las más avanzadas tecnologías de control.
Perdón… Por resaltar los apellidos de los famosos casi nos olvidábamos de mencionar al principal protagonista del film: el joven Liam Hemsworth en el rol de Adam Cassidy quien, pese a estar presente en todo el metraje de la cinta, no transmite ninguna de las virtudes, ni tan siquiera defectos, que imaginaríamos para un personaje que todo lo circunscribe a su decisiva perversión económica. La suya es una actuación inexpresiva y falta absoluta de relieve, donde se quiere ensalzar como héroe a un pobre espía informático. Mejor recordarle por su interpretación en Los juegos del hambre (2012). Y como dato curioso para sus admiradoras, el hecho de haberse convertido recientemente en ex pareja de la controvertida cantante Miley Cirus.
La joven actriz Amber Heard, a quien ya vimos en Los diarios del ron (2011), en aquel entonces con su prometido Johnny Depp, es la cara bonita de esta nueva producción norteamericana, con un final más que previsible y que se huele desde el principio.
Firma: Joaquín Guitart
Adam Cassidy (Lian Hemsworth), un muchacho de 26 años, odia su trabajo en la Compañía Tecnológica Wyatt Corporation. Cuando manipula el sistema para ayudar a un amigo, es acusado de un delito federal. Su jefe, Nicolas Wyatt (Gary Oldman), le propone un trato para evitar la cárcel: infiltrarse en la Compañía de Jock Godard (Harrison Ford), antiguo mentor de Wyatt, y actuar como espía industrial. Adam acepta y logra ascender rápidamente, descubriendo en sí cualidades que jamás imaginó poseer. Ahora su vida es perfecta, adora su trabajo, tiene un Porsche y sale con la chica de sus sueños. Y todo lo que tiene que hacer es traicionar a los que le rodean.
