Heredera o continuación cronológica del cine de pandilla, Días de vinilo arranca con un grupo de adultos con cierto complejo de Peter Pan pero a la búsqueda de la madurez. Es inevitable trazar paralelismos con cineastas reconocidos (Woody Allen o Billy Wilder), motivos fílmicos o lugares comunes (todos los escenarios de la comedia romántica) e incluso cuestionarse la vinculación con las experiencias del propio Gabriel Nesci. Es inevitable incluso porque él mismo no lo esconde. Las huellas están por todas partes.
Cada uno de los cinco protagonistas trabaja o desea hacerlo en el mundo del espectáculo (cine, radio, música). Se planea sobre el claroscuro horizonte de los sueños no alcanzados en lo personal y en lo profesional. Se traza un crudo diagnóstico sobre los padres de esa generación y las consecuencias de la fractura familiar en la seguridad afectiva de los hijos. Se ironiza, dando en la diana, acerca de cierta élite intelectual, fría y poco humanista. Y se escenifican todos los motivos que componen el paradigma de cierta comedia-romántica hollywoodiense de tal manera y con tal consciencia que Nesci consigue darle la vuelta sin volverse sarcástico y aportar un sano sentido del humor. Como comentó un crítico argentino, la propia película Días de vinilo hace su crítica mientras se despliega minuto a minuto (Leonardo Sbaraglia incluido). Ahí reside la gracia de una historia que si no habría hecho aguas por todas partes.
Esta originalidad se suma a un ágil trabajo en los diálogos, agudos y esquivos del golpe vulgar de tanta comedia de protagonismo masculino con boda en ciernes. En realidad, el film de Gabriel Nesci (que ha trabajado varias veces con Gastón Pauls) se convierte en una especie de Sueño de una noche de verano, en el que se cuestionan, confunden y fusionan los sentimientos amorosos y las aspiraciones vitales a golpe de banda sonora. Queen, Beatles, Rod Stewart, Morrissey, Marvin Gaye, INXS, Phil Collins rondan por casi cada plano de un modo más romántico que dramático.
Con ciertas carencias en algunos planteamientos vitales -propias de la generación que retrata, como la Alta fidelidad de Stephen Frears-, Días de vinilo se mueve más allá de los límites trazados por la comedia convencional y logra divertir y entretener con buen reparto coral.
Firma: Lourdes Domingo
Director: Gabriel Nesci
Guionistas: Gabriel Nesci
Intérpretes: Ignacio Toselli, Leonardo Sbaraglia, Rafael Spregelburd
Género: -
País: Argentina
Fecha estreno: 06/06/2014
Lenguaje: Coloquial
Damián, Luciano, Marcelo y Facundo son amigos de la infancia a los que les une la pasión por la música.
Damián es guionista de cine, Luciano es locutor de radio, Marcelo es el líder de una banda tributo a los Beatles y Facundo siempre soñó con ser compositor, pero trabaja en un cementerio privado. Cuando este último decide casarse, los conflictos latentes empiezan a salir a la luz.
Título original: Días de vinilo
País: Argentina
Duración: 118'
Fecha producción: 2012
Distribuidora: Abordar
Color: Color