Una gran mujer

Este es el segundo largometraje del director Kantemir Balagov. Su ópera prima Demasiado cerca ya consiguió el premio en el Festival de Cannes 2017, además de obtener una mención Zabaltegui en el Festival de San Sebastián del mismo año.

Por su parte, Una gran mujer ha obtenido el premio Fipresci de la crítica y al mejor director en la sección Un certain regard del pasado Cannes.

Aún y cuando el cine ruso no nos ha ofrecido últimamente demasiadas esperanzas cinéfilas, es muy positiva la llegada de este nuevo título. En él, la vida de dos mujeres se une en el cénit de sus sentimientos y hasta la saciedad de sus más profundos deseos, sin que ello suponga el más mínimo menoscabo de su amor fraterno ante las dificultades con que la difícil vida de post-guerra las rodea. Incluso, en esa complicadísima existencia, se llega hasta plantear la posibilidad de ceder, de una a otra, una de las más íntimas y esperanzadoras metas de una mujer.

La trama nos muestra, en variada mescolanza, una serie de imágenes de sensible amor parental, junto a algunas escenas de realidad sexual que, si bien justifican en su fondo algunos aspectos del relato cinematográfico, quizás podrían ser obviadas con otras sugerencias argumentales que no habrían hecho desmerecer el carácter dramático del film.

Con todo ello, hay que destacar la sensible interpretación de ambas protagonistas, base indiscutible de una película en la que el amor parental destaca por encima de todas las dificultades y se sobrepone, trágicamente eso sí, a una época en la que todo era difícil y dramático para la humanidad.

Firma: Joaquín Guitart