Un mar de enredos

Este es un remake de la comedia homónima interpretada por Goldie Hawn y Kurt Russell en 1987. En ese caso, era ella quien, amnésica, entraba en una familia distinta a la suya y aprendía todas las tareas del hogar.

En la nueva versión, debido al cambio social al que se enfrenta la mujer hoy día, los papeles se invierten y vemos a una madre desbordada por múltiples trabajos y bajas condiciones laborales, y a un hombre que se ha de esforzar por aprender a llevar una familia.

En este sentido, la película se afianza sobre un fuerte mensaje de igualdad. Por un lado, el ansia por cubrir este foco hace que los guionistas olviden atar cabos en el guión. Por otro lado, esta versión resulta de cartón piedra al lado del glamour de la original.

Otro de los miedos es que la versión traducida arrebate las bromas que vienen dadas por la variedad idiomática (ya que Kate es norteamericana y Leonardo mejicano). Pero una vez pasamos el umbral de la primera parte (con sabor a yate y playboy), los protagonistas consiguen fraguar una historia tierna sobre la familia. Y, para la sorpresa del público, es una secundaria Eva Longoria la que, sin quererlo, se lleva mucha atención.

Firma: Carla Sciamma