The beast

Ópera prima de Lee Jung-ho como director, cuyo clima narrativo se inspira en el cine coreano popular que triunfa desde hace dos décadas mezclando acción y violencia. Esta vez, su propuesta también parte del cine negro, donde policías corruptos atormentados lidian con sus demonios que están tanto en crueles asesinos en serie como en su propio interior.

En The beast, el protagonista tiene problemas de control de la ira y también de sus fuentes de información; sobrevive a un matrimonio fracasado donde pervive la estima; y es un hombre fuerte en la calle y en la comisaría, sin diplomacias ni complejos.

A estos lugares comunes (introducidos con acierto y verosimilitud) se unen otros como los secundarios cuyas apariencias engañan, la crudeza en las luchas entre clanes, coartadas en el último segundo, cruces de líneas morales, ausencia de escrúpulos, alcohol y otros vicios.

Con estos epítetos, está claro el público objetivo de un film que alardea de sus pastiches (habituales en el estilo coreano), como los cambios en la realización con ralentís o aceleraciones o las mutaciones contrastadas entre la banda sonora.

Firma: Lourdes Domingo