Momias

Momias es un regalo. A pesar de los fallos que se le puedan encontrar, es un precioso obsequio para amenizar a toda la familia. Algunos querrán reprocharle que no hay momias, que es predecible, que sus personajes encarnan diversos clichés o que la trama falla por momentos. Esto es cierto pero, aun así, el resultado es un producto agradable para todos los públicos.

Hay que recordar que es una película destinada a los más pequeños, de ahí el tono y la simplicidad de la historia. A pesar de ello, está llena de humor para adultos y es de agradecer que este humor no sea forzado ni de mal gusto, sino que las situaciones en sí son divertidas. Además, la cinta juega con diferentes culturas, espacios y tiempos (que contribuyen a hacer gracia) así como también con una música pegadiza de la que no abusa. Todo eso mantiene un ritmo acertado que atrapa hasta el final.

Por otro lado, la animación está muy trabajada y deja un film visualmente muy correcto. A este conjunto hay que añadirle los mensajes positivos acerca de vencer los miedos, luchar por los propios sueños y encontrarse a uno mismo. Con todo, queda una propuesta tierna, ocurrente, con un cocodrilo encantador (no podíamos olvidarlo), original y bastante equilibrada.

Firma: Patricia Amat