Hace once años la actriz catalana Sílvia Munt, ganadora de un Goya por el mejor cortometraje documental (Lalia, 1999) dirigió otro largo del género llamado Gala, sobre la musa de Salvador Dalí.
Esta vez, ella y su equipo han convivido con algunos miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Sabadell (Barcelona) durante un año, retratando las historias personales que suponen un golpe de realidad brutal a la vez que conmovedor. El actor catalán Ramón Madaula, al que hemos visto en numerosas series catalanas y en Isabel, es el productor ejecutivo de la pieza.
La PAH es una asociación que nació en el año 2009 para asesorar a las personas con problemas con el banco y el pago de la hipoteca. Promueven acciones solidarias y también se enfrentan a los bancos pacíficamente, ocupando viviendas abandonadas por la Administración Pública para evitar los desahucios. Así, han logrado evitar numerosas expulsiones y dar un lugar donde vivir a muchas personas.
Técnicamente es una obra sencilla, pero porque todo radica en el contenido impactante y que remueve hasta la médula, para dejar un rastro de humanidad, dolor y sufrimiento tan profundo como la veracidad de los dramas que cuenta.
La película consigue su objetivo, despierta a los ciudadanos dormidos y acomodados en su estable rutina y abre los ojos de una manera nada lacrimógena en el sentido peyorativo de la palabra, ya que sí arrancará lágrimas a los más perceptivos (lo mínimo ante tal panorama).
El hombre necesita un hogar, protección básica donde salvaguardar su dignidad y establecer su vida. Y eso es de lo que mucha gente –con la que nos cruzamos más a menudo de lo que creemos– carece, pues le ha sido arrebatado por un sistema, que se pone en cuestión debido a que no garantiza unos mínimos, dicho sea de paso, a personas que han cumplido con su deber responsablemente. Y si en algún caso no lo han hecho en algún caso, queda claro que es por los agujeros de un plan fallido, condiciones económicas turbias y asfixiantes y por un sentido de la supervivencia puesto psicológicamente en peligro y al límite.
Lo más sorprendente y admirable de todo –una lección de humanidad en mayúsculas– es la respuesta de los afectados: varios coinciden en que son mejores personas después de pasar por una situación así y, desde el umbral de la pobreza, dicen con sencillez y un especial brillo en los ojos que “ahora soy menos egoísta”, “he aprendido a querer de verdad a las personas y a ser solidario”. Estos seres humanos por excelencia reconocen que ya no son la persona que eran antes ni lo serán. El sufrimiento deja una huella muy honda, vital, que muchas veces marca el camino a la verdadera felicidad, aun en medio de penurias. Lo vivido en la Granja del Pas es un antes y un después.
A parte de lo evidente, el documental puede plantear cuestiones como el valor de la información sobre lo que pasa a nuestro alrededor, que no nos insensibilicemos y que acudamos al lado de estas personas que nos dan mil vueltas.
Firma: Begoña Arribas
Director: Sílvia Munt
Guionistas: Daniel Lacasa, Raquel Cors, Sílvia Munt
Intérpretes: -
Género: Documental
País: España
Fecha estreno: 27/11/2015
Lenguaje: Coloquial
El documental muestra las historias humanas que hay detrás de un desahucio y la acción solidaria de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Sabadell (Barcelona). A través de varios testimonios conocemos muy de cerca el problema y sus consecuencias en las personas que lo sufren, sus miedos, su dolor y la sorprendente reflexión a la que llegan algunos de estos héroes anónimos.
Título original: La Granja del Pas
País: España
Duración: 80'
Fecha producción: 2015
Distribuidora: Splendor Films
Color: Color