El relato que nos presenta La chica del brazalete es durísimo e incluso fríamente espeluznante. El juicio a una chica de dieciocho años –acusada de haber matado a su mejor amiga dos años antes– es, en manos de Stéphane Demoustier, un documento fílmico más que correcto y, por eso mismo, rotundamente descorazonador.
El guion se ancla en lo objetivo, por lo que las escenas del tribunal ocupan casi todo el metraje. La mirada que, como espectadores, paseamos por otros escenarios (el domicilio familiar, la casa de la playa o los trayectos en coche) nos acerca a los protagonistas con desigual resultado. Los padres de la joven, dolorosamente bien interpretados por Roschdy Zem y Chiara Mastroianni, nos permiten intuir su turbación, su aflicción y su tímida esperanza. Sin embargo, la acusada nos impide, con su hieratismo y su hermetismo, penetrar mínimamente en su interior, trasladándonos a nosotros el desconcierto, el dolor y la impotencia.
Conforme se van desvelando los hechos previos al asesinato, en especial los relativos a las actividades sexuales de Lise, Flora y los otros chicos y chicas de su entorno, el horror y la duda aumentan aunque, en ningún momento, esto ayude a despejar la incógnita sobre la culpabilidad o inocencia de Lise.
La falta de profundización en los personajes o de análisis de la situación podría restar valor a esta película. No obstante, la maestría con la que sus realizadores ruedan, recrean los ambientes, diseminan la información, mantienen los tiempos o sostienen los silencios, hacen de esta terrible historia un buen trabajo cinematográfico. Stéphane Demoustier ha sabido partir de un elegante y sutil comienzo y llegar a un enigmático final, pasando por una narración, a veces sórdida y descarnada, cargada de diálogos pero visualmente eficaz.
La duda y la confusión que nos transmiten con tan buen pulso fílmico nos aboca, eso sí, a un profundo pesimismo. Parece que nos hemos acostumbrado a desconocer las actividades, sean del tipo que sean, de nuestros hijos adolescentes y a no actuar ante ello por un lógico y, a la vez, irresponsable temor a violentar su intimidad o coaccionar su libertad.
De ese modo, como en el caso de Lise, se comprueba que, con solo dieciséis años, es una perfecta desconocida a la que se alimenta, se da una buena vida burguesa, pero no se le exige nada en absoluto. Lo que tristemente revela La chica del brazalete es que parece que seguimos sin dar con la tecla (o sin atrevernos a tocarla) de una educación (o de un trato con cualquier ser humano) integral, que cohesione los aspectos físicos, psíquicos, emocionales, sexuales, académicos, de ocio, etc. adecuados a la edad. Y esto ni ayuda a las personas, ni a las familias ni, por lo tanto, a la sociedad.
Firma: Esther Rodríguez
Director: Stéphane Demoustier
Guionistas: Stéphane Demoustier
Intérpretes: Anaïs Demoustier, Annie Mercier, Chiara Mastroianni, Melissa Guers, Pascal Garbarini, Roschdy Zem
Género: Drama
País: Francia
Fecha estreno: 12/02/2021
Lenguaje: Vulgar
Lise, una joven de dieciséis años, es acusada de haber asesinado a puñaladas a su mejor amiga. Dos años después, comienza el juicio y se irá revelando ante todos, sus padres incluidos, las circunstancias que rodearon el homicidio.
Título original: La fille au bracelet
País: Francia
Duración: 95’
Fecha producción: 2019
Distribuidora: Surtsey Films
Color: Color