El gran baño

El francés Gilles Lellouche, guionista y director de esta nueva película, protagonizó también como actor más de 60 títulos en su más que vasta carrera cinematográfica. Entre ellos Mea culpa (2014), Belles familles (2015) y Sous le même toit (2017).

En esta nueva ocasión, ahora como director, cuenta con conocidos intérpretes, como el francés de origen judío Mathieu Amalric (protagonista en 2013 de La venus de las pieles escrita y dirigida por Roman Polanski con quien guarda, por cierto, un curioso parecido físico).

Complementado con un destacado elenco actoral, El gran baño es ciertamente un “film sorpresa”. Acostumbrados a muchas producciones con un propósito reiterado de hechos circunstanciales, sin que ello suponga un demérito, Lellouche hace ahora un guiño a la ilusión. Una ilusión que envuelve y proporciona pequeños, aunque nuevos, horizontes a un sector con futuros vitales reducidos…o conformistas, o bien meramente reducidos al transcurrir del día a día, sin excesiva esperanza personal ni colectiva.

El gran baño abre la esperanza de un panorama diferente a este grupo de seres resignados a una vida sin demasiadas alegrías ni, por supuesto, tampoco problemas inmediatos.

Y que, en la situación actual, una película sea así de positiva es para celebrarlo justo porque este pequeño resquicio innovador supone un alto en el camino para disfrutar, al hilo de El gran baño de algo tan cotidiano como la salida del sol.

Un simbolismo de gozosa apertura a un nuevo futuro.

Firma: Joaquín Guitart