Champions

Bobby Ferrelly ha decidido introducir en el remake de Campeones ciertos elementos propios del estilo americano con la intención de llegar al nuevo público al cual se dirige. De esta forma, han adaptado el humor y también han metido una trama de amor tópica, repleta de clichés y previsible, que no ayuda ni aporta nada al corazón de la historia.

Otro de los puntos negativos es la selección del reparto. Aun habiendo escogido actores que se parecen a los originales con tal de mantener la fidelidad de los personajes, muchos no logran ofrecer buenas interpretaciones. En Campeones había un casting fantástico y cada uno de los protagonistas aportaba de manera natural algo a la cinta, mientras que en el remake esas particularidades no se aprecian y resultan en un conjunto artificioso.

A pesar de que la película está llena de mensajes positivos y trata de forma tierna una realidad que concierne a muchas familias, no consigue entrelazar adecuadamente el drama y la comedia. Así se transmite una sensación que constantemente fuerza, sin éxito, los momentos “sensibles”. Acompañados por una música triste y buscando la lágrima fácil, dejan claro, sin ninguna sutileza,  lo que está bien y lo que está mal.

En definitiva, los mejores momentos son los que más respetan al largometraje de Javier Fesser y aún así tampoco le hacen justicia. Todos los cambios realizados provocan una pérdida de la autenticidad que caracteriza la cinta del director español, cosa que hace preguntarse con qué intención ha sido realizado este remake.

Firma: Laura Corpas