Basada en hechos reales

¿Resurge Polanski a sus 84 años de edad? La respuesta queda a medias. Este nuevo largometraje que firma el famoso director cinematográfico –con guión adaptado de una premiada novela de Delphine de Vigan– nos seduce desde un principio gracias al indudable interés de su planteamiento inicial.

Y es que un argumento basado en la personalidad de una escritora literaria de éxito, aunque en horas bajas, es siempre un seguro atractivo para un público que confía los thrillers sofisticados. En este caso, además, el film viene abanderado por un apellido de renombre en ese terreno, como es Roman Polanski, y por dos actrices tan relevantes como Emmanuelle Seigner (la actual esposa de Polanski y a la que ya recordamos en La venus de las pieles, del mismo director) y la atractiva Eva Green, en este caso virtual intrusa en la vida de la novelista.

Ambas protagonizan el relato desde el principio hasta el fin de la cinta, con absoluta entrega a una temática no exenta de similitud con argumentos deja vu, aunque con suficiente fuerza y atractivo para la gran pantalla.

Sin duda, Polanski domina la acción y el planteamiento cinematográfico hasta bien entrada la cinta, pese a la falta de emotividad y escasa actitud provocadora entre ambas actrices. Probablemente, la novela de la que procede la película quizás lo sugiere aunque tampoco lo define, obligando a una fase final desconcertante y bastante distante del desarrollo intuido desde los primeros minutos.

En síntesis, Basada en hechos reales es un título que, en parte, justifica la fama de su director, aunque no le añada nuevos oropeles a su tumultuosa carrera cinematográfica.

Firma: Joaquín Guitart