El título ya es una declaración de intenciones, ya que hace referencia a la nueva acepción del término avatar que, en general, se entiende como una representación visual de uno mismo, como usuario, en un entorno tecnológico (vídeojuegos, redes sociales…). Sin embargo, en la película de Cameron Avatar significa algo aún más vivo, pues es la creación, mediante ingeniería genética, de un na’vi o habitante del planeta Pandora. A esa creación se le puede dar vida mediante la conexión con la conciencia de un humano. Una especie de alterego o trasposición mental en otro cuerpo.
James Cameron ideó el argumento y características de producción de Avatar hace 14 años (poco antes que rodara su buque insignia Titanic), pero la tuvo que desarrollar más tarde (hace 4) debido a que la tecnología no permitía hacer lo que su imaginación sí podía. Este director norteamericano es un de los clásicos de la acción y ciencia-ficción contemporáneas con títulos como Abyss, Aliens o Terminator, en las que siempre ha intentado hacer un gran espectáculo para mayorías, donde tecnología y relato no estuvieran reñidos. Es cierto que, en algunos casos, ha salido bastante airoso, pero en Avatar la historia no es, precisamente, un paradigma de originalidad. Un refrito evidente de mitos y con intenciones ampulosas impiden un desarrollo más creativo y rítmico del guión.
Para el film se ha utilizado el ya conocido sistema de captura del movimiento de actores reales, pero con una técnica de casco que hace que sea más precisa la percepción de detalles gestuales. A este adelanto tecnológico, que en la película se perfila con la animación en 3D de los estudios WETA (Gollum de El señor de los anillos, o el monstruo de King Kong), Cameron le ha sumado el de la cámara virtual que permite crear planos dentro de entornos virtuales como si fueran reales, algo que se nota de manera especial y con fuerza en los travellings aéros por la naturaleza de Pandora. Además, se ha rodado en 3D estereoscópico en la imagen real, sin olvidar en cariz 3D de la animación generada por WETA en ordenador, lo que ha supuesto una convergencia de tecnologías y materiales hasta ahora nunca probado
Cargada de referencias a historias sobre la supervivencia de una civilización y sobre el liderazgo, el guión ofrece un trasfondo que mitifica la ingenuidad de la vida tribal, ligada religiosamente a la naturaleza. Esta línea argumental cobra fuerza también en el mensaje ecológico –sin duda no muy complejo en su planteamiento y exposición- y en la dialéctica entre humanos y na’vis, también bastante polarizada.
Por otra parte, la historia recurre al deseo de superación personal en el caso de Jake, que se ve atrapado física y emocionalmente en su mundo, y liberado y crecido en su avatar. Esa ambivalencia entre universos, entre la vigilia y en sueño, trae al caso alguna resonancia calderoniana y de otros autores como el del relato de Julio Cortázar: La noche boca arriba.
El listado de aspectos estéticos y referenciales sería inacabable, pero eso y su notoriedad técnica no justifican un metraje desmesurado, sobre todo en un desenlace dilatado en exceso.
Firma: Lourdes Domingo
Director: James Cameron
Guionistas: James Cameron
Intérpretes: Giovanni Ribisi, Joel Moore, Michelle Rodriguez, Sam Worthington, Sigourney Weaver, Stephen Lang, Zoe Saldana
Género: Ciencia-ficción, Fantástico
País: EE.UU.
Fecha estreno: 18/12/2009
Lenguaje: Coloquial
Debido a la crisis energéntica que vive la Tierra, algunos humanos se han desplazado a un planeta rico en fuentes, sobre todo una que podría ser la solución al problema. Jake Sully, un exmarine ahora paralítico, se desplaza a Pandora como parte de un equipo científico, al que había pertenecido su difunto hermano gemelo. Una vez allí, Jake descubre los conflictos de intereses –económicos, político-militares y de investigación- que los humanos están estableciendo entre ellos, mientras los nativos asisten perplejos y amenazados a un posible cambio en la historia de su pueblo.
Título original: Avatar
País: EE.UU.
Duración: 162'
Fecha producción: 2009
Distribuidora: Fox
Color: Color