Si bien es cierto que las guerras del siglo pasado –en especial la Segunda Guerra Mundial– son episodios muy recurrentes y usados en el cine, no por ello tienen que defraudar o las piezas deben ser iguales las unas a las otras. En este caso, nos enfrentamos a una visión mucho más intrapersonal que, más que exponer a Trotsky y su séquito bolchevique, quiere mostrar las emociones y las reacciones al dolor.
Como hilo argumental principal, tenemos a un viejo Jakob –encarnado por Mykyta Dziad cuando es joven y por Juozas Budraitis de mayor– accediendo a una residencia geriátrica en busca de su viejo amigo Anton (Regimantas Adomaitis). A partir de ahí, se empieza a contar la historia. Él, judío, y Anton (Nikita Shlanchak), cristiano, son íntimos compañeros que comparten absolutamente todo. En ese sentido, apenas se hace hincapié en la amistad tan dicotómica, en términos religiosos, más que en algún comentario.
La fotografía es especial. Durante todo lo que parece ser el recuerdo de Jakob, los bordes de la pantalla están un tanto difuminados. No es algo que agote, se acostumbra uno rápido.
Por otro lado, la realización y el tratamiento de la cámara no son una virguería, al contrario, son bastante modestos; lo justo como para que no sea un problema: el ritmo es adecuado en momentos sosegados, con primeros planos y barridos lentos, a la vez que lo es en situaciones de acción, con un enfoque más abierto y dinámico.
La música también resulta muy correcta. De nuevo, no destaca aunque es crucial para la inmersión de la misma manera que lo es el guion y la interpretación. Hay figuras bastante significativas para el argumento y conceptualmente potentes, como por ejemplo Dora (Tetiana Grachik), la figura femenina que capitanea el trabajo sucio de Lev Bronstein.
En definitiva, no es que vaya a ser la película más taquillera del año, pero desde luego está a un nivel alto: no porque sobresalga en general, sino porque tiene pocos errores y eso la hace accesible y digerible para un público muy amplio. Lejos de ser la misma trama de siempre, este drama bélico-biográfico soft, es muy disfrutable.
Firma: Roi Iturregui
Director: Zaza Urushadze
Guionistas: Dale Eisler, Vadym Yermolenko, Zaza Urushadze
Intérpretes: Anton Sebastyan, Juozas Budraitis, Natalia Ryumina, Oleg Simonenko, Pavlo Shpegun, Regimantas Adomaitis, Sergey Denga, Simson Bubbel, Vaiva Mainelyte
Género: Biográfico, Drama, Histórico
País: Ucrania
Fecha estreno: 12/02/2021
Lenguaje: Coloquial
La amistad de dos jóvenes amigos perdura, vetusta, ante las atrocidades de la guerra y el desgaste del tiempo. Los bolcheviques ganan terreno y llegan a un pequeño pueblo ucraniano donde se cobran las vidas que les parece. Algunos de los vecinos, por sus grandes pérdidas, deciden plantar cara y trazan un plan que alejará, no para siempre, a Anton y su “‘hermano’” Jakob.
Título original: Anton
País: Ucrania
Duración: 102’
Fecha producción: 2019
Distribuidora: European Dreams Factory
Color: Color