Exitosa película de Arne Glimcher (Los reyes del mambo), basada en un bestseller de John Katzenbach y co-producida por el propio protagonista, el gran actor Sean Connery (hoy tan lejos del primer James Bond). Se trata, pues, de una cinta comercial, que ha sido realizada con más brillantez formal que auténtico ingenio creador.
Concebida a modo de thriller judicial, gustará sin duda a los aficionados a este tipo de relatos. Con un buen clima de suspense, el filme da un inesperado giro en su último tercio, pero todo sabe a demasiado “preparado”. De ahí que Causa justa resulte poco creíble en su conjunto o, al menos, un tanto convencional. Destaca, en cambio, el capítulo interpretativo: junto al “coloso” Connery –cada día con más seguidores–, los actores de color Laurence Fishburne y Blair Underwood (uno de los abogados de la serie televisiva La ley de Los Ángeles) dan muy bien sus tipos, al igual que el resto del reparto.
Otra cuestión es la que plantea la película: el discutido tema de la pena de muerte. Tras una clara oposición, el giro final pone en tela de juicio la actitud mantenida por el abogado protagonista, que no sólo se la cuestiona en conciencia sino que trasmite esa duda al espectador. Ambigüedad crítica de la que se resiente el fondo argumental y que ya fue ampliamente debatida en los propios Estados Unidos.
Sin caer en fáciles concesiones a la galería, los autores son más directos en la crítica al sistema judicial norteamericano, aunque tampoco queda clara la denuncia a la tortura de la policía ante casos similares. Al mismo tiempo, se evidencia con creces las consecuencias de un fallo en el ejercicio de la abogacía y la repercusión de la actitud del pueblo por el linchamiento de un presunto culpable y después asesino-víctima. También se muestra críticamente el racismo y el fanatismo religioso. Pero, ¿dónde están las verdaderas víctimas?, cabría preguntar. Ni el realizador Glimcher ni el novelista Katzenbach acaban de responder; pero sí lo ha hecho la taquilla… Y la Warner Bros. y el mismo Sean Connery acaso pueden estar satisfechos.
Extras DVD:
- Audio: castellano, inglés
- Subtítulos: inglés, castellano
Florida, años 90. Un abogado retirado, catedrático en Harvard y famoso detractor de la pena capital, es reclamado por un joven de color –condenado a muerte por asesinato y violación de una niña– para que le defienda de un delito que afirma no haber cometido. El regreso al ejercicio del profesor le llevará a una serie de situaciones límite, que pondrá no sólo en peligro su vida y la de los suyos, sino que cuestionará la postura defendida ante la pena máxima.
