Estamos ante otra obra discutida en torno a la biografía de un gran compositor universal. Como antaño pasó con Amadeus, ahora le ha tocado el turno a Beethoven. Y su guionista y realizador ha sido el joven Bernard Rose, que osó declarar con motivo de la promoción internacional de su atrevido biopic: “Así descubrirán los norteamericanos que Beethoven no es un perro”. Perfectamente ambientado en Praga y en bellos escenarios naturales de la actual República Checa, cuenta con una banda sonora extraordinaria y la notable interpretación de Gary Oldman (Drácula) como el músico protagonista, bien secundado por la delicada Isabella Rossellini, la cada día más reconocible hija del pionero del Neorrealismo y de la actriz Ingrid Bergman.
Es obvio que Rose ha conseguido una brillante evocación de la época romántica, con algunos momentos sublimes –especialmente, la secuencia final del estreno de la Novena– u otros de extrema sensibilidad –cuando, impedido por la sordera, intenta escuchar sus sinfonías– y de gran fuerza dramática, como las escenas de la guerra napoleónica, el frustrado suicidio de su sobrino Karl o la actitud vejatoria de los niños hacia el entonces despreciado y arruinado compositor. Sin embargo, Bernard Rose, que antes había cultivado el cine fastástico-terrorífico (Paperhouse, Candyman), parece seguir influido por el popular género; ya que la hipótesis defendida por el autor de película no está comprobada: que fue la antagonista cuñada de Beethoven su amor imposible, así como su protegido y desdichado sobrino el verdadero hijo de éste.
Con todo, el realizador dice haberlo deducido de la investigación que ha desarrollado para rodar el filme. Los puristas y biógrafos del músico vienés –como ocurrió con la visión que se dio de Mozart en el Amadeus de Milos Forman– tienen ahora la palabra. Aun así, Rose no es Forman, y su película romántica –no exenta de aisladas concesiones a la voluptosidad– no es la obra maestra que también merecía Ludwig van Beethoven. Pero es muy posible que los amantes de la música clásica y seguidores de este autor no se sientan defraudados, deleitándose con los trece fragmentos de piezas de Beethoven que brinda la cinta, cuyo compact-disc ya está batiendo récords.
Firma: Josep Maria Caparrós
Extras DVD:
Viena, 1827. Es enterrado el compositor Ludwig van Beethoven. Su antiguo secretario, Schindler, halla una carta dirigida a un “amor imposible”, a quien legará su preciada herencia. A fin de descubrir este enigma y la persona beneficiada, comienza una larga investigación –que rememora el pasado del genial músico romántico– entre las mujeres con las que supuestamente tuvo relaciones sentimentales.