La crítica del principiante
Ni No Kuni fue un gran título. Corría el año 2013 cuando llegaba este juego con un nombre un tanto raro. Detrás del proyecto estaba Level-5 (creadores de Yo Kai Watch, El Profesor Layton o Inazuma Eleven) y el Estudio Ghibli (reputado estudio de cine manga creador de grandes películas como El Viaje de Chihiro, La Princesa Mononoke o Porco Rosso). El juego sorprendió a muchísima gente tanto por su calidad como por la profunda y sentimental historia de amor de un niño por su madre fallecida. Ahora, nos llega la segunda parte.
Volviendo a Ni No Kuni
El Renacer de un Reino es una secuela, pero no guarda relación directa con los acontecimientos de la primera entrega. Tienen en común un mundo paralelo a la realidad, pero poco más. En esta ocasión, nos encontramos con una aventura que gira alrededor de la soledad, la fortaleza y las ganas por mejorar.
La historia gira alrededor de Evan y Roland. El primero es un joven desterrado de su reino que, en lugar de preparar una revolución por recuperar su sitio, decide empezar de cero y crear el suyo propio. A su lado, estará Roland, quien después de unos hechos convulsos en el mundo real, aparece en esta realidad alternativa en la que vivirá todo tipo de aventuras.
Sin querer desgranar más hechos de la historia, solo diremos que, si bien es intensa y aporta valores positivos –como reponerse de las adversidades, afrontar la soledad, la esperanza…-, no es tan emotiva como la de la primera parte -ni los personajes tan profundos como aquellos-.
Un juego con mucho por hacer
La base del juego es similar a la del primer Ni No Kuni y a la de títulos como Dragon Quest VII: El Periplo del Rey Maldito –comparte hasta estilo visual-. Se trata de un juego de rol abierto a todos los públicos en el que nuestro personaje evoluciona a medida que avanzamos en la aventura, aprendiendo nuevas técnicas y habilidades.
La exploración tiene gran importancia en unos entornos coloridos, repletos de vida y con muchísimas cosas por descubrir. Lo mismo ocurre con las mazmorras y niveles cerrados, que esconden más de lo que a priori pudiéramos pensar.
Cuando nos enfrentamos a un enemigo, el sistema de combate recuerda al de otros juegos de rol-acción como los últimos Tales of. Nos podemos mover libremente y ejecutar algunos de los comandos disponibles –tenemos dos botones de ataque, otro para usar magia…-. Se ha de decir que el control de un u otro personaje no difiere demasiado. Tampoco faltan las típicas “invocaciones” para que nos ayuden en combate. En esta ocasión se llaman Fois y vienen a reemplazar a los Únimos del primer videojuego. Cada uno tendrá una utilidad distinta y podremos ir mejorándolos a medida que los usemos.
¿Solo es un juego de rol?
Pero si en algo destaca Ni No Kuni 2 sobre la primera parte y sobre otras aventuras es por la gran cantidad de cosas que podemos hacer. Además de avanzar en las misiones principales y explorar los bastos entornos, introduce elementos de juegos de estrategia que nos han sorprendido gratamente. Nuestra obligación como rey es mejorar nuestra ciudad y para ello tenemos que obtener recursos y crear nuevas edificaciones, fortificaciones, etc. En cierto modo nos ha recordado al magnífico Dragon Quest Builders.
Además, podremos realizar “batallas campales” contra otros ejércitos al más puro estilo New Little King Story, siempre de una manera muy sencilla y simplificada pero entretenida. Además, las misiones secundarias nos recompensarán con nuevos ciudadanos que unir a nuestra causa, lo que es otra gran motivación para hacerlas.
Contenido
Ni No Kuni 2 es un título catalogado para mayores de 12 años. En primer lugar, no resulta especialmente violento, pese a esa ambientación medieval fantástica y al uso de armas y magia. Ni es visceral ni explícito ni comparable al de otros títulos para mayores. Además, la historia que nos explica no se mueve por el odio ni la venganza, sino por valores como la amistad, la superación y la siempre lucha recurrente entre el bien y el mal.
Es verdad que la cantidad de tareas y opciones que propone puede abrumar en un principio, pero todo está presentado de un modo asequible y progresivo. El componente de estrategia es muy interesante.
Apunte especial al estilo gráfico estilo dibujo animado con el toque característico de Level-5 tanto en los personajes como en los entornos.
Lo mejor:
Buena historia y personajes bien construidos.
Construir la ciudad es una tarea tan interesante como adictiva.
Todo está bien engranado, por lo que hacer una cosa tiene su consecuencia positiva.
Algunos valores de la historia.
Lo peor:
Menos emotivo que la primera parte.
Tantas tareas pueden abrumar.
Conclusiones:
Ni No Kuni 2: El Renacer de un Reino es una gran aventura de rol con una dificultad creciente y progresiva y una historia que atrapa desde el principio. Ofrece una gran cantidad de tareas por hacer e introduce novedades muy interesantes.
Llega la secuela de uno de los títulos más emotivos, con más encanto y más originales de la última generación. Así es Ni No Kuni 2: El renacer de un Reino.
