Los autos locos
Análisis
Pierre Nodoyuna llegó en 1968 a la pequeña pantalla para revolucionar a toda una generación que disfrutó con las locuras de esta serie de animación creada por Hanna Barberá.
Animación clásica en 2D en la que la habilidad de los dibujantes y guionistas suplen la ausencia de detalles en el dibujo y los paisajes.
Lo que gusta de Los autos locos (además de su edad que la ha convertido en un producto «clásico retro») es el bucle infinito en el que se mueven los personajes y sus carreras. Representación caricaturizada al extremo de diversas tipologías humanas, cada uno de los conductores ofrece inmensas posibilidades con las que juegan los guionistas.
Sencilla, divertida, animada y muy, pero que muy loca Pierre Nodoyuna y su panda son de lo mejorcito que ha pasado por la infancia de varias generaciones.
ficha técnica
Género: Animación
Subgénero: 2D
Año: 1968
Cadena:
Intérpretes: -
Presentador: -
Público
TPValoración
Contenido
Junto a Pierre y su perro Patán al mando del bólido Ferrari Especial, se sumaron Piedro y Roco con su Rocomóvil; Pareja Compleja con su Espantomóvil; Locovich y su Súper Convertible; Hans Fritz conduciendo su Stuka Rakuda; el sargento Blast y el soldado Meekly en el Súper Chatarra Especial; Mafio y sus “pandilleros” con el Antigualla Blindada; Lucas el granjero y el Oso Miedoso en el Alambique Veloz; Pedro Bello en su Terrible Salchicha y, finalmente, Penélope Glamour en su rosa Compact Pussycat.
Con el objetivo de lograr el título de ‘El conductor más loco del mundo’, este conjunto de excéntricos competidores se ven las caras en cada capítulo para competir en una carrera sin fin.
Título original: Wacky Races
Creador: -
Director: Joseph Barbera, William Hanna
Guión: -
Productora: Hanna-Barbera Productions
Duración: 20'
País: EE.UU.